No es fácil identificar a una persona sordociega. A simple vista, su ceguera puede resultar evidente pero su carencia auditiva es más compleja de detectar. Por este motivo, las asociaciones de sordociegos españolas siguen las recomendaciones de órganos internacionales que han diseñado un tipo de bastón para que utilicen estos discapacitados.
Se trata de incorporar al bastón blanco que les ayuda a moverse de forma autónoma por su ceguera una franja roja. Este símbolo se emplea habitualmente por individuos con una discapacidad visual grave pero evidencia también la presencia de una discapacidad auditiva en el usuario.
"Aporta mayor seguridad en la autonomía de los desplazamientos puesto que le identifica como una persona con sordoceguera y, además, facilita su posible comunicación con el resto de personas, conscientes de su discapacidad", explican desde estas entidades, que reclaman la incorporación de información relativa a este bastón en los reglamentos de circulación, así como en charlas, campañas y demás jornadas sobre seguridad vial. Su intención es que toda la sociedad reconozca el significado de este bastón.
