El comunicador Xavier Sardà aseguró ayer que los periodistas ya no tienen "el patrimonio de nada" en un mundo en el que "las mentiras y las verdades andan dándose la mano" desde que la gente va por la vida "con una cámara en el bolsillo".

Su vocación periodística empezó a los 14 o 15 años cuando fue consciente de que quería estudiar Ciencias de la Información. Acabó trabajando en RNE, cuando la emisora abrió en Cataluña y comenzó buscar gente que "supiese escribir mínimamente el catalán": ahí comenzó Sardà en el mundo audiovisual, haciendo tareas administrativas en el departamento de programas.

El mundo de la comunicación, ha reconocido, ha cambiado mucho desde entonces, porque antes los periodistas "se buscaban la vida para escribir, buscaban información y la brindaban" en una tarea que era su "patrimonio".

Pero "esto se ha acabado", y desde que todo el mundo lleva una cámara en el bolsillo la mayor parte de las imágenes que se ven, sobre todo en internet, son obtenidas por personas "la mar de normales que se encuentran en una situación y la graban y la dan" de forma "instantánea". Ha vaticinado que los periódicos aguantarán, quizá, veinte años más. La comunicación "se ha revolucionado de una manera que es apasionante, todo se sabe al momento, y muchas cosas por parte de gente que no es periodista", ha enfatizado.