El último censo de lobos y primero a nivel nacional, cuyas conclusiones dio a conocer ayer el Ministerio de Medio Ambiente, estima que entre los años 2012 y 2014 había en España 297 manadas de esta especie. El censo, elaborado por el Grupo de Trabajo del Lobo, en el que participaron expertos del Ministerio y de nueve comunidades autónomas, concluyó además que en ese periodo los lobos ocupaban más de 91.000 kilómetros cuadrados. Castilla y León, Galicia y Asturias se sitúan a la cabeza en número de manadas, mientras en que algunas áreas de la mitad sur peninsular, como el Sistema Central y las provincias de Ávila, Segovia, Guadalajara y Madrid, se constata la expansión. Por otro lado, el censo refleja una rarefacción -grupos familiares menos densos- en puntos del noreste, como País Vasco, Burgos o Soria.