El Cuarteto para el Diálogo Nacional en Túnez alertó ayer, al recibir el Nobel de la Paz en Oslo, de que es necesario consolidar el proceso democrático en este país africano porque la transición, aunque "exitosa", afronta muchos retos. "Los éxitos logrados en la transición consensuada aún nos exigen grandes esfuerzos para fortificarlos y consolidarlos. Deben ser un punto de partida para nuevos éxitos. Asumimos que hay muchos retos por delante y que riesgos significativos nos esperan", afirmó la presidenta de la patronal, Wided Bouchamaoui, al recibir el premio con los líderes de la Liga Tunecina de Derechos Humanos, la Unión General de Trabajadores Tunecinos y la Asociación Nacional de Abogados.