Ágatha de Santos / VIGO

Una exposición de escultura de Leiro inauguró, en abril de 1999, la galería VGO de Vigo y la de de Carlos Rial la cerrará el próximo día 30 al extinguirse la colaboración que su directora, Cristina Barreras, mantenía con otro galerista gallego. En estos más de seis años, el centro ha acogido casi sesenta muestras -una media de ocho al año- de pintores, escultores y artistas gráficos de reconocido prestigio internacional como los dos citados anteriormente, Silverio Rivas, Leopoldo Nóvoa, Antón Goyanes, Din Matamoro y Berta Cácamo, creadores gallegos con los que esta galería, referente del arte contemporáneo en Vigo, ha colaborado desde su apertura. A éstos hay que sumar artistas foráneos como Luis Gordillo, Sergi Aguilar y Miguel Navarro.

Sin embargo, la intención de Barreras es proseguir en el mundo del arte al frente de otra galería, que seguiría las líneas de trabajo mantenidas en VGO y que según su responsable, "tan bien han funcionado en estos años".

Una de las novedades que Barreras pretende introducir en esta nueva andadura, que espera poder en marcha el próximo otoño, será prestar especial atención a los artistas emergentes gallegos, aunque manteniendo a aquellos con los que ha trabajado durante todo este tiempo, y alternar las exposiciones de creadores gallegos con las propuestas de artistas de otros lugares.

"Me gusta mucho trabajar con artistas de fuera, tanto nacionales como internacionales, pero lo que hay que tener en cuenta es que aquí en Galicia y más concretamente en Vigo y su entorno contamos con unos

creadores de una categoría indiscutible a quienes hay que apoyar", afirma la galerista.

Pero hasta entonces, Barreras dedicará los meses estivales a buscar un local, tarea, confiesa, nada sencilla. "Tiene que ser apropiado para este tipo de actividad: céntrico y que resulte cómodo para el público en general", explica.

VGO ha estado presente en las cuatro ediciones de la Feria de Arte Contemporáneo ARCO celebradas desde 2000, una cita que le ha permitido acercar el arte contemporáneo que se hacía en Galicia y que le gustaría continuar haciendo.