La delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Blanca Hernández, tachó de "desmoralizante y desolador" las declaraciones de la concejal de fiestas de Málaga, Teresa Porras, en las que afirmó, refiriéndose a la Feria, que "el año pasado las niñas iban con las bragas en la mano para que se le secaran" . En declaraciones en RNE, Hernández opinó que las personas con responsabilidades públicas "deben dar un respeto absoluto a la Constitución, que habla de igualdad entre hombres y mujeres, y de respeto a los derechos humanos", además de "ayudar a construir una sociedad mejor". La delegada destacó la importancia de visibilizar este tipo de maltrato y de hacer hincapié "en las condenas a los agresores, en el rechazo hacia el agresor y en la intolerancia hacia ellos" . La edil malagueña afirmó al respecto que le parece "desolador" que "se conjugue y se compare" con la violencia de género sus declaraciones, algo que "no tiene nada que ver con el civismo", que es lo que ella reclamaba al citar unos ejemplos de conductas incívicas.