Feliciano Miguel Rosendo da Silva, líder y fundador de la supuesta secta Orden y Mandato de San Miguel Arcángel, ingresó ayer en el centro penitenciario de A Lama, como presunto autor de delitos de asociación ilícita y abusos sexuales. Marcos Amboage, juez decano de Tui y titular del Juzgado de Instrucción mixto Número 1 de la localidad, decretó para el imputado prisión provisional comunicada y sin fianza.

Tras declarar durante cuatro horas y media, Miguel Rosendo salía a las dos de la tarde de los juzgados tudenses, cuando se cumplían 72 horas desde su detención el pasado jueves en su domicilio de la localidad madrileña de Collado Villalba. Dos guardias civiles lo escoltaban e introducían en la parte trasera de un vehículo rotulado del cuerpo, el mismo coche en el que había llegado hasta la céntrica plaza de la Inmaculada de Tui a las nueve y media de la mañana, para su puesta a disposición judicial.

El magistrado mantiene el secreto de sumario, en el que figuran imputadas otras tres personas por el delito de asociación ilícita. Se trata de la máxima colaboradora del líder, la moañesa Marta Paz -una de las consagradas miguelianas que vestían hábito sin ser monjas oficialmente reconocidas por la Iglesia-, que declaró el sábado y quedó en libertad con la obligación de comparecer semanalmente en los juzgados hasta la celebración de juicio. Los otros dos encausados son Esteban y Sandra, dos exmiembros de la presunta secta que tuvo su "casa madre" en Mougás (Oia) y que hace pocos meses se trasladó a Collado Villalba (Madrid), bajo el nombre de La Voz de Serviam.

La operación "El Edén" llevada a cabo por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Tui, comenzó el pasado jueves con la detención en Madrid del líder de los miguelianos y de su secretaria y mano derecha, para registrar la casa, donde se procedió a la incautación de 4.000 euros en efectivo y de dos vehículos. Ambos detenidos fueron trasladados después hasta las instalaciones de la Comandancia de Pontevedra y, el viernes, al cuartel de Tui y a un registro en el domicilio de Oia utilizado como sede central de la organización, que la Policía Judicial rastreó durante dos horas para confiscar dos ordenadores. El sábado pasó a disposición judicial Marta Paz.

Un total de ocho familias de Vigo, Moaña y Redondela, con hijos y nietos en la Orden de San Miguel, denunciaban públicamente el pasado miércoles al líder y fundador de la agrupación por presuntos abusos sexuales y delitos fiscales cometidos supuestamente en la mansión de Oia. Se refirieron a las personas que siguen en la orden que ahora se llama La Voz de Serviam, con domicilios en Collado Villalba y El Escorial. Según aseguraron, sus descendientes continúan "con la voluntad anulada por este individuo". Reclamaron una respuesta contundente de las autoridades eclesiásticas de toda España.

Investigación de la Diócesis

El Obispado de Tui-Vigo tuvo un primer conocimiento de supuestas irregularidades cometidas por Rosendo en diciembre de 2012 e inició un proceso de investigación interna, que llevó a apartar al líder de sus funciones y a nombrar a un comisario extraordinario por tiempo indefinido. El 16 de abril de 2014 se dio a conocer esta decisión a los miembros de la asociación y muchos de ellos se dieron de baja.

Actualmente, la Orden y Mandato de San Miguel Arcángel, como informa el Obispado, sigue siendo una asociación pública de fieles de derecho diocesano establecida en Tui-Vigo. Consta de 27 miembros llamados "exploradores" que realizan labor de apostolado, y cuatro "consagradas miguelianas" que atienden una residencia geriátrica en Bustarviejo (Madrid). Todos ellos, precisa, están bajo la responsabilidad del citado comisario extraordinario.

Además de haber intervenido de forma directa sobre la organización, la Diócesis ha mostrado su disposición a colaborar con la justicia en la investigación.