El buque oceanográfico Sarmiento de Gamboa zarpaba del puerto de Vigo con destino a Las Palmas en enero de 2011 para realizar la segunda parte de la campaña científica Malaspina. Había regresado en abril de 2010 procedente de Santo Domingo, donde llegó tras haber explorado el Atlántico durante casi dos meses.

El objetivo: dar la vuelta al mundo explorando sus océanos. Malaspina había arrancado en 2010 en Cádiz con la partida del Hespérides, el otro buque que protagonizaría la misión, con un total de 250 investigadores embarcados en distintas etapas. La expedición, que contó con un presupuesto de casi de 7 millones de euros pertenece al Programa Consolider Ingenio 2010, y está liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Cuenta con una participación destacada de la Armada Española y la colaboración de un gran número de entidades científicas y culturales. Recibe su nombre del oficial de origen italiano Alejandro Malaspina, quien a finales de siglo XVIII dirigió la primera expedición científica de navegación española.