El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, ha afirmado que el desarrollo normativo de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) el derecho de los padres a educar a sus hijos desde sus convicciones y los Acuerdos Iglesia-Estado, por lo que ha anunciado que si esto no se corrige, pedirá al Gobierno que desarrolle "una normativa, un Decreto Ley que establezca el horario mínimo de esta enseñanza".

Así lo ha indicado en una rueda de prensa ofrecida en la sede de la CEE en Madrid, después de celebrar la Comisión Permanente el pasado miércoles y jueves, donde ha dicho que "si no se pone arreglo" a esta situación, la petición de la CEE es que, "como han hecho los gobiernos anteriores, se produzca desde el Gobierno central una normativa, un Decreto Ley que establezca el horario mínimo de esta enseñanza".

Gil Tamayo ha manifestado que hay obispos de comunidades autónomas como la de Andalucía que le han pedido a la Junta andaluza "quedarse como están" y ha recalcado que el desarrollo de la nueva ley en algunas regiones la enseñanza de Religión "queda reducida a la mitad de lo que está ahora en la LOE, que es una ley de un gobierno socialista". "Los ciudadanos tenemos ese derecho y es a recurrir, pero antes y sobre todo a dialogar, que es lo que estamos haciendo", ha destacado.

Seguidamente, ha rechazado que en algunas regiones la enseñanza de Religión tiene una "unidad de 45 minutos" asignada, lo que los obispos españoles consideran "totalmente insuficiente para proporcionar una mínima educación de calidad" porque supone una "reducción del 50% del tiempo del que se dispone en la actualidad con la LOE".

El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte respeta la queja de la Conferencia Episcopal sobre la configuración y horario de la asignatura de Religión en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), pero avisa de que no la va a modificar.

Lo han asegurado a Europa Press fuentes de este departamento, tras conocer la petición de Gil Tamayo. Las mismas fuentes han advertido de que el ministerio no entra a fijar las horas de una asignatura determinada y señalan que simplemente se ha dado una distribución de horarios a Religión en su conjunto, asignándola una unidad semanal de 45 minutos como mínimo, que puede ser ampliado o no por los centros.

La Conferencia Episcopal advierte de que tal y como está configurada la asignatura en la LOMCE no se respeta el derecho de los padres a educar a sus hijos en sus convicciones ni los acuerdos entre el Estado español y la Santa Sede, un extremo que el ministerio niega.

El ministro ha afirmado en alguna ocasión que, aunque la Conferencia Episcopal advierta de que los acuerdos con la Santa Sede amparan que exista oferta completa de Religión, también en Bachillerato, desde el Ministerio de Educación no lo entienden así, de manera que es sólo evaluable en Primaria y ESO.