Es mediodía del viernes. Solo falta jornada y media para que las administraciones de lotería cierren y no vendan más décimos para el sorteo de navidad. En la número 35, en el Carrefour de la avenida Travesía de Vigo de la ciudad olívica, ya se han agotado varios números. Los acabados en13, 15 y 69 no quedan desde octubre. No hay colas pero sí un goteo constante de personas preguntando por este o aquel décimo. La lotera de esta administración, Teresa Méndez, asegura que la venta de lotería este año ha sido menor que ejercicios anteriores y señala a un cumpable: el Gobierno central. "El impuesto del 20% sí ha afectado ya que la gente se retrae a la hora de comprar", apunta.

Méndez hace referencia a la nueva medida del Ministerio de Hacienda. Si el domingo resulta agraciada o agraciado con un premio, debe saber que si le tocan hasta 2.500 euros no tendrá que pagar IRPF por ese dinero.

Pero si gana a partir de esa cifra, deberá pagar un 20% a Hacienda. Así, si resulta beneficiario de 5.000 euros, un total de 1.000 se marcharán de su bolsillo hacia 'papá Estado'.

Méndez aclara que no solo esta tributación que se aplicará por primera vez echa para atrás a la hora de comprar décimos: "También está la crisis. La venta es menor. Desde el año pasado, se nota un descenso de la venta".