El escritor Manuel Rivas, aspirante al Premio Mandarache de Cartagena, asegura que no imagina "mejor premio" que el de ver su libro "en manos de gente de todas las edades", ya que los libros deben "ser inmigrantes" y pertenecer a la gente para convertirse en "seres vivos". La VIII edición del Premio Mandarache arrancó ayer con el primer encuentro de Rivas, con los 600 estudiantes en la Universidad de Cartagena.