El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, aseguró ayer en Burgos que "si uno no es capaz de acostumbrarse a las protestas evidentemente no vale para un cargo público". Wert, que inauguró la nueva Biblioteca Pública del Estado en Burgos, fue recibido bajo gritos de "dimisión" por un grupo de varios centenares de manifestantes, entre los que se encontraban miembros de la Plataforma por una Educación Pública de Calidad y el concejal burgalés de IU, Raúl Salinero. Wert dijo que "llama la atención" que la gente proteste por la inauguración de una dotación cultural porque "tendría mucho más provecho aprovechar los importantes fondos bibliográficos y documentales" de la nueva biblioteca. "Cada uno es libre de hacer lo que quiera y, desde luego, a mi no me afecta lo más mínimo", concluyó.

Wert destacó en Burgos el papel "esencial" de las bibliotecas públicas en la mejora de las competencias lectoras de los jóvenes. Asimismo, explicó que en la sociedad digitalizada siguen jugando un papel "muy importante".