Se cumple el primer aniversario del fallecimiento de Francisco Fernández del Riego. Quien estaba considerado como el principal referente de la cultura gallega y de la historia del galleguismo del siglo XX, murió tal día como hoy hace un año, a media tarde, en su casa de la plaza de Compostela. Estaba a punto de cumplir 98 años y como manifestó una persona muy próxima a él al comunicar el óbito, "se fue apagando lentamente".

Recordar a don Paco del Riego es evocar una vida "que se alimenta de una pasión y una fidelidad inquebrantable a Galicia y a su cultura", como se pone de manifiesto en su segundo y último libro de memorias, "Camiño andado" que publicó rebasada ya la frontera de los noventa años y que venía a completar lo narrado en "O Río do tempo".

Vida intensa

Del Riego (Vilanova de Lourenzá, 1913) fue secretario general de las Mocidades Galeguistas durante la República. En la posguerra fue uno de los fundadores de la editorial Galaxia, de la que fue director gerente, y participó activamente en algunos momentos clave de la historia de la resistencia galleguista. Autor de una obra muy extensa que abarca todos los géneros, fue Presidente de la Real Academia Gallega y desarrolló una labor fundamental en la Biblioteca Penzol, de la que fue director durante 47 años, hasta solo unos meses antes de su muerte.

Legado

La Penzol comparte espacio en la Casa Galega da Cultura con el legado que del Riego hizo en 1995 a la ciudad de Vigo, representada por su Concello.

Una colección formada por más de 30.000 libros, un importante archivo de documentos contemporáneos y una valiosa pinacoteca de época, además de otros objetos, galardones y recuerdos personales.

Señala en sus memorias que "doné en vida y no legué para después de muerto, libros y cuadros para que no se quebrase una larga trayectoria de servicio a Galicia. Quise así llegar al final siendo fiel a los principios que inspiraron el transcurrir de mi existencia, pues durante más de setenta años trabajé duro en el empeño de servir a mi país y tenía que ser consecuente en el final. Y por eso hice entrega para el futuro lo que tanto amé, lo que fui reuniendo con cariño e ilusión durante mi larga vida".

Y escogió a Vigo como receptor "porque en esta ciudad rehice un andar esperanzado que el drama de la guerra civil tronzara. A ella le debo inolvidable asistencia en la recuperación."

Esa generosidad de don Paco no se vio correspondida por los responsables municipales respecto al tratamiento acordado a su donación.

Tanto es así, que un año antes de su fallecimiento, en declaraciones a FARO DE VIGO reconocía no estar satisfecho con el trato que el Concello daba a su donación. "Non estou satisfeito", dijo, "sinto unha decepción grande. Non estou arrepentido, porque teño unha identificación coa cidade moi grande, pero síntome triste. Xa desistín de decir nada. Alá eles. Estou moi decepcionado cos dirixentes, pero teño claro que una cousa son os administradores e outra a cidade".

Sin actos especiales

La Fundación Penzol decidió no organizar ningún acto en memoria de del Riego al cumplirse este primer aniversario de su fallecimiento "porque queremos centrarnos en el centenario de su nacimiento que celebraremos en 2013. Su familia, por su aparte, celebrará una misa de recuerdo en la iglesia de Los Apóstoles a las ocho de la tarde.