En la lápida de Cunqueiro, uno de los ganadores de los Premios da Crítica, se puede leer:_"Eiquí xaz alguén, que coa súa obra, fixo que Galicia durase mil primaveras máis". Bieito Ledo, uno de los fundadores de los Premios da Crítica de Galicia, no es tan ambicioso. Se conforma con que los galardones duren, al menos, 34 primaveras más. Porque la 34ª es justo la edición que se celebrará este año, en el mes de octubre, y en la que se recuperará la vieja costumbre de que sea Vigo la ciudad que acoja la celebración.

Ledo habla de 34 primaveras más después de meses de incertidumbre sobre la continuidad de los premios –incluso se alertó del riesgo de su desaparición– debido a discrepancias internas en el seno de la Fundación que los otorga. Precisamente ayer, una nueva directiva confirmaba que los Premios da Crítica todavía tienen cuerda para rato. De hecho, tal y como explicó Ledo, editor de Ir Indo, en la Fundación se "quiere dar un cambio generacional para ir preparando la alternativa de futuro". Eso sí, siempre teniendo en cuenta, como él mismo señala, que existe "mucho capital humano almacenado". Es por eso que desde ayer algunos detalles cambiarán, aunque no la pluralidad ideológica.

Según Ledo, sobre todo se notará en que la junta directiva de la Fundación "se rejuvenece", al incorporar gente más joven y "se feminiza" con María do Cebreiro, Blanca Roig, María López Sández, Charo Portela, Inma López Silva y Comba Campoy.

En la refundada Fundación como presidente figura el propio Bieito Ledo y como vicepresidente, Antón Pulido, mientras que de la secretaría se hace cargo Manuel Bragado. La directiva se completa con nombres como Antón Sobral, Víctor Freixanes, Marcos Lorenzo, Ernesto Sánchez, Anxo Tarrío, Xabier Senín o Anxo Rajó.

De momento, no obstante, hay decisiones que todavía no se han tomado._"Aunque hablamos de si aumentar o disminuir los premios, todavía no lo hemos decidido", señala Ledo. No es lo único que, como dice, "queda sobre la mesa". También lo de elegir Galego Egrexio o el jurado que se encargará de determinar quiénes serán los merecedores de los galardones de la 34ª edición. En todo caso, Ledo sí tiene claro que el próximo año los premios volverán a su fecha de siempre: mayo.

En lo que sí se avanzó ayer, explicó, es en la "consolidación del grupo". "Tiene que ser un grupo de convivencia. Creo que se va a lograr", augura, y que los premios "seguirán". En ese sentido, insiste en agradecer el "apoyo moral" recibido por parte del presidente del Consello da Cultura, Ramón Villares, y del presidente de la Real Academia Galega, Xosé Luis Méndez Ferrín, además del soporte "imprescindible" de la Consellería de Cultura. "Somos conscientes de la austeridad, pero con casi nada podemos hacer milagros", concluye.