Carlos Berzosa, es madrileño nacido en 1945. Rector de la Universidad Complutense de Madrid, catedrático de Economía Aplicada, ha sido centro y hasta diana en algunas polémicas recientes, pero nadie niega que, sabe mucho entre otras cosas sobre materias hoy tan acuciantes como las políticas públicas en tiempos de crisis.

-El pensamiento único que tanto se denuncia no se ve por ninguna parte.

-Es más bien predominante. Ciertamente, no existen los paradigmas únicos. Tampoco antes, en los tiempos del paradigma keynesiano, todos eran keynesianos. Con la crisis de los años setenta entró con fuerza creciente el paradigma neoliberal. Más mercado y menos Estado. Y eso conduce a que muchas veces entre los partidos conservadores y los socialdemócratas apenas haya diferencias.Los analistas próximos a unos y otros acaban diciendo casi lo mismo. Bueno, también es cierto que aun así sigue habiendo gente heterodoxa, gente contracorriente.

-Pues entre los banqueros y los capitanes de las grandes empresas no veo ni un liberal.

-En la práctica no los hay. Defienden el liberalismo, pero fundamentalmente referido al mercado laboral.Y al tiempo quieren que el Estado les apoye y les proteja el mercado frente a la competencia exterior.

-¿El problema son los carteles y monopolios más o menos encubiertos?

-En gran parte.Ha habido progresos. Hay empresas con capacidad verdadera de innovación. De todos modos, el grueso del aparato productivo viene de la autarquía y de la liberalización franquista, donde mucha gente se hizo fuerte gracias a los mercados restringidos y con privilegios. El origen de las sagas de grandes empresarios con frecuencia está en monopolios enlazados con el INI y con iniciativas del Estado. Con la progresiva liberalización han logrado salir al exterior. Pero hay que recordar que empezaron con la protección y siendo favorecidos. Total, que no tenemos un potente aparato industrial. Sale fuera sólo la banca o la construcción. Pero no las empresas industriales, que son las que influyen en el mundo. Avanzan los países con un potente sector industrial y que exportan. Los servicios son importantes, pero la diferencia la marca la industria.

-España podría exportar su industria turística, tenemos los mejores hoteles del mundo en la relación calidad-precio.

-Sí, NH está en toda América Latina. Los hoteles españoles son muy buenos en la relación precio y calidad.Enun hotel de México recuerdo me saludaron todos los empleados y el cocinero me dijo que había hecho prácticas con Ferrán Adrià.

-Otra industria.

-Claro, en México estuve en un restaurante vasco y decían que era de Arzak o de uno de sus discípulos.

-Se habla de un cocinero como si fuese discípulo de Severo Ochoa.

-Porque crean escuela. En Málaga, buscando un restaurante con cocina de la zona, encontré uno con la cocina de Adrià y nos dijo que había estudiado con él la cocina deconstruida. Allí la conocí por primera vez.

-Me temo que el creador de Google no habría podido salir adelante en España.

-Quizá.

-No habría encontrado financiación, siempre orientada a cosas y sectores mucho más trillados.

-En EEUU, dicen, te dan financiación si fracasas en varios proyectos porque así demuestras capacidad de lucha. Vi un reportaje realizado en California con emprendedores que no habían podido salir adelante en España. A partir de ahí creamos un grupo con el Banco Santander para esas cosas.

-Hay que relacionar empresa e investigación, se repite a diario como un mantra, pero ¿qué hay de eso en realidad?

-Existe algo. No partimos de cero. En la Complutense y con la Autónoma hicimos un campus apoyados por el Ministerio, la comunidad, el Ayuntamiento y otras instituciones. Pero hay poca presencia de empresas. Bueno, siempre está el Banco Santander. Creamos una incubadora de empresas. Intentamos combinar la investigación y la empresa sin grandes resultados, muchas empresas las crean investigadores, pero son mundos muy distintos

-Parte del dogma de la izquierda: ayudar.Pero el dogma liberal propone, más bien, quitar barreras. La cuestión,más que empujar, es desbrozar.

-Sí, hay que quitar barreras. Hay que quitar mucha burocracia y batallas entre ministerio y comunidad. Los rectores las padecemos. Pero estoy a favor de que el Estado corrija los muchos fallos del mercado. Incluso cuando es eficiente no por eso genera modelos socialmente deseables. Eso sólo se logra con políticas públicas.

-En un escenario democrático se puede lograr porque se vota.

-Ya, pero en EE UU, desarrollado y avanzado, hay grandes diferencias económicas. Tienen las mejores universidades del mundo, pero nuestro servicio de salud es mejor, allí muchos quedan fuera del sistema de salud.

-¿Qué pensó cuando en su Universidad los estudiantes rechazaron los colegios mayores mixtos?

-Me quedé perplejo. Me sorprendió.

-Bueno, cuando usted era estudiante supongo que también protestaban por lo que fuese ante el rector Botella.

-Botella, para empezar, no nos recibía. Ahora, además, la enseñanza es mixta. Tenemos 40 colegios mayores, algunos de religiosos o militares y son mixtos. Esas protestas son un ejemplo del fracaso de la enseñanza. Después los estudiantes pedían perdón, estaban arrepentidos

-Para ajustarse a Bolonia, ¿menos grupos con más alumnos, al revés con más profesores o restricción de matrícula?

-Bolonia no dice nada sobre cómo llevar a cabo la enseñanza. Dice que el crédito que damos debe ser no sólo presencial, sino que debe tenerse en cuenta el esfuerzo del alumno. Y en España se consideró que eso implicaba tutorías, una atención más personalizada. Bien. Pero no es nuevo. Y depende del número de alumnos. Incluye trabajos y tutorías, no sólo tomar apuntes. Además, eso está en crisis, los alumnos no van a clase.

-¿Cómo?

-Ocurre en todos los sitios, en Cataluña, en Asturias, en Bilbao... van a academias privadas. Ya desde el primer día. Creo que fue la Politécnica de Cataluña la que puso la obligatoriedad de ir a clase y hubo una rebelión de las academias, porque los estudiantes van a las academias en las horas de clase. Ni en Ciencia van, sólo acuden a las prácticas porque son obligatorias. Es un desastre.

-Alemania crece al 3,6 por ciento, más los emergentes y otros países. ¿La crisis es sólo mediterránea?

-El PIB en Alemania cayó más que el de España. Cayeron los bancos, algo sorprendente.Y en el Reino Unido se vinieron todos abajo.Y en Bélgica...

-Bueno, cuentan con la ventaja de no tener Gobierno.

-Aquí tenemos sectores más débiles, como la construcción, que todo lo ha afectado. Y empresas medias y pequeñas que se vienen abajo porque carecen de estructura financiera potente. El virus de la crisis afecta de forma especial a los cuerpos más débiles, como España.

-Zapatero ha dicho que superaremos la crisis en cinco años, ¿será la primera vez que acierte?

-A lo mejor, sí. Se ha vuelto realista y a lo mejor acierta.

-Ese realismo le puede costar las elecciones.

-Porque no lo ha explicado. No puedes decir que no haces reformas del mercado laboral y después salir a escena y decir que eso es lo bueno.