Los fondos se entregarán al Ministerio de Sanidad para impulsar los servicios sanitarios de Zimbabue que se encuentran paralizados, como denunció el pasado mes de diciembre el ministro de Salud Pública, David Parirenyatwa.

Zimbabue, que atraviesa una profunda crisis económica, sufre "una escasez crítica de recursos en el sector sanitario, y los hospitales centrales, literalmente, no están funcionando", dijo Parirenyatwa, lo que provoca que muchos de los afectados por el brote de cólera no estén recibiendo tratamiento.

Para Veneman, que ha visitado Zimbabue durante tres días "el brote de cólera es sólo la punta del iceberg".

"La economía de Zimbabue se está derrumbando por la mayor inflación del mundo que alcanza, según las últimas cifras un 231 millones por ciento, mientras que más de la mitad de la población depende de la comida que donan las organizaciones de ayuda humanitaria", declaró Veneman.

Además, "los centros sanitarios han cerrado sus puertas y para cuando comience el nuevo curso escolar no hay ninguna garantía de que vayan a haber suficientes profesores para todos los alumnos", detalló la directiva en la rueda de prensa que ofreció en Johannesburgo.

Veneman, que durante su visita se reunió con el presidente del país, Robert Mugabe, visitó además un centro de tratamiento del cólera y un programa que presta apoyo a más de 250.000 huérfanos y niños vulnerables.

UNICEF no sólo donará los 6,5 millones de euros, si no que además ayudará en la perforación de más de 100 pozos en los próximos cuatro meses en las zonas de Zimbabue que sufren la falta de suministro de agua.

El organismo de la ONU también ha donado más del 70 por ciento de los medicamentos esenciales.