Pasar muchas horas viendo la televisión, navegar por Internet o jugar a la videoconsola son algunas de las actividades favoritas de los más pequeños de la casa que hacen día tras días sin tener en cuenta las consecuencias. Un estudio realizado en Estados Unidos demuestra que estas actividades de ocio provocan que los niños desarrollen en su edad adulta problemas de salud como llegar a ser obesos o empezar a fumar antes de la edad permitida.

El estudio muestra que los niños que más consumen medios o entretenimiento audiovisual son más susceptibles de desarrollar una obesidad en su edad adulta, empezar a fumar antes de la edad permitida y tener relaciones sexuales de forma precoz, que los niños que pasan menos horas enfrente de la pequeña pantalla. Además, la investigación, realizada por expertos del U.S.

National Institute of Health, la Universidad de Yale y el California Pacific Medical Center, refleja que la excesiva exposición a la pantalla de televisión, Internet y videojuegos está directamente relacionado con el prematuro consumo de alcohol, drogas y con una mala trayectoria escolar.

"Nos hemos quedado sorprendidos ante los resultados del informe. Nos hemos dado cuenta de que el consumo afecta muy negativamente la salud infantil", aseguró uno de los investigadores que han llevado a cabo el informe, Ezekiel Emanuel. "Actualmente en el siglo XXI, tenemos una vida saturada de medios de información y reducir las horas de exposición va a ser complicado", añadió Emanuel.

OBESOS A LOS SIETE AÑO POR LA TELE

Los expertos han estado preocupados durante décadas sobre el impacto de la violencia televisiva y cinematográfica, y el contenido sexual en los jóvenes telespectadores. Otra de las preocupaciones de los investigadores es que los niños se pasan horas sentadas en el sofá viendo la tele o jugando al ordenador, cuando podían estar corriendo en la calle.

Esto provoca que un niño de 3 años que vea más de 8 horas semanales la tele tiene muchas posibilidades de llegar a ser obeso a la edad de 7 años, según explica el informe. Por si esto fiera poco, el estudio añade, que la mayoría de los niños estadounidenses ven la tele más de siete horas semanales.

El informe es el resultado del análisis de 173 estudios realizados desde 1980 y trata de reflejar el impacto de los medios en el desarrollo físico de los niños y adolescentes estadounidenses. Los informes analizados están en su mayoría enfocados al consumo televisivo, aunque algunos, la minoría, van dirigidos hacia el consumo de videojuegos, Internet, cine y música.

Las tres cuartas partes de los 173 coinciden en que el incremento que se ha experimentado en los últimos años del consumo mediático está directamente relacionado con el desarrollo de malos hábitos en el futuro.