Contaminar menos tiene fecha y precio. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha estimado que si se quiere reducir a la mitad las emisiones contaminantes a la atmósfera en todo el mundo, los países deberán invertir un montante de 45 billones de dólares, unos 29 billones de euros. De continuar con las políticas internacionales actuales, las emisiones se incrementarán hasta en un 130% y la demanda de petróleo aproximadamente en un 70%.

El director Ejecutivo de la AIE, Nobuo Tanaka, señaló que "el mundo se enfrenta a la desalentadora combinación del aumento de la demanda energética, el incremento de las emisiones de efecto invernadero y el ajuste en las fuentes". Por ello, se hace cada vez más imprescindible una "revolución en tecnología energética a nivel global", y así lo señala la agencia en un informe realizado a petición del G-8 y que se marca como objetivo rebajar al 50% los niveles de CO2 en la atmósfera.

Si continuasen las políticas actuales, la AIEA advierte de que en lugar de reducir las emisiones éstas aumentarían hasta un 103%, mientras la demanda de fuel también repuntará, en torno a un 70%. Esta expansión quintuplicaría la actual producción de crudo de Arabia Saudí. A juicio de Tanaka, "estamos muy lejos del desarrollo sostenible", ya que pese a la concienciación ecológica de los últimos años los niveles de contaminación se han incrementado, en gran parte por el descontrol de los países emergentes, como la India o China.

Como claves, la agencia alude a la reducción y almacenamiento del dióxido de carbono, la energía nuclear y la eficiencia energética, mediante avances como las células de hidrógeno. La Agencia Internacional habla de construir 32 nuevas centrales nucleares y 17.500 aerogeneradores al año, además de equipar a 35 centrales eléctricas con dispositivos de captura y almacenamiento de las emisiones de carbono.