Del mismo modo que Pontevedra está a la cola de las ciudades gallegas en reciclaje de vidrio, ocurre lo mismo dentro de la comarca. Solo Marín (apenas 9,7 kilos por persona y año) arroja peores datos que la capital, mientras que Sanxenxo (32,5 kilos) y sobre todo Poio (53,4) encabezan este listado, en el que también destacan Cuntis, Cerdedo-Cotobade, Vilaboa y Campo Lameiro, que se sitúan en el entorno de los veinte kilogramos por residente.

Se trata de datos únicamente referidos a la recogida selectiva de vidrio, un apartado en el que Pontevedra repitió en 2017 los datos del año anterior, pero que los demás municipios -salvo Marín- muestran una sustancial mejoría en el reciclaje total.