Raxó volvió a vivir ayer un día especial. Después de varios años de una fiesta venida a menos, ayer la parroquia recuperó parte del esplendor del día en honor a San Gregorio.

La Comisión de Fiestas, compuesta por el Raxó Club de Fútbol, organizó una jornada con diferentes iniciativas en la que los oficios religiosos se mezclaron con las actuaciones musicales.

Desde por la mañana, la parroquia amaneció con fuegos y un pasarrúas a cargo de un grupo de gaitas. Luego se celebró una misa solemne, cantada por un coro y seguida por una procesión acompañada por la banda de música y una tirada de fuegos. A continuación fue el turno del concierto ofrecido por la Banda de Música de Meaño.

Ya por la tarde, Vides Novas cogió el relevo y llevó a cabo una actuación de danza popular gallega.

Por último, por la noche a partir de las 21 horas, en una carpa instalada para la ocasión, comenzó la gran verbena, amenizada por Pontevedra y La Ola ADN.

Galo Fodorico

La actividad cultural devuelve hoy la atención al Entroido. Poio cierra los Carnavales con el pospuesto Enterro do Galo Fodorico. La comitiva fúnebre saldrá a las 18 horas de la Praza do Mosteiro hasta la de Arís, donde se incinerará. Al mismo tiempo, se celebrará la Festa do Choqueiro, en la que se otorgarán premios por disfraces y se repartirán raciones por 3 euros.