Las obras de soterramiento de la línea de alta tensión de Monte Porreiro comenzarán a principios del mes de marzo y las primeras previsiones son de seis o siete meses de trabajo.

Tras una reunión entre técnicos de la asesoría jurídica y del área de Urbanismo del Concello de Pontevedra y los servicios de Unión Fenosa, se acordó un cronograma sobre las inminentes obras.

"El Concello ha cumplido con su parte", anunció la concelleira de Urbanismo de Pontevedra, Anabel Gulías, de informó de que ahora el gobierno local debe ceder la obra de carácter civil a la empresa eléctrica tras haber actuado en 680 metros lineales donde irá la canalización bajo tierra que incluye también dos cámara de empalme, dos arquetas y arquetas de comunicación con las torres.

Esta cesión tendrá lugar en breve, tal y como aseguró Gulías, que informó de que Unión Fenosa ya cuenta con las autorizaciones administrativas pertinentes, sin las cuales no se podría iniciar el trabajo.

La línea de alta tensión de Monte Porreiro fue uno de los temas tratados en la Comisión de Ordenación do Territorio del Concello.

En marzo hará un año que el Concello anunció el compromiso adquirido por Unión Fenosa de llevar a cabo las obras sobre la línea de alta tensión que sobrevuela el barrio.

Plan de inversiones

Los trabajos están recogidos dentro del plan de inversiones de Fenosa de los años 2018-2020, que incluye la sustitución de la línea aérea de alta tensión ubicada desde la subestación de Mourente, en la rotonda a Montecelo, hasta el río Lérez. Son alrededor de 1,8 kilómetros afectados y supondrá la retirada de nueve torres de alta tensión.

Se confirma así la última fecha apuntada por la compañía para comenzar estos trabajos. Primero se apuntó a junio pero después se adelantó a "marzo o abril", todo ello en medio de una controversia sobre la necesidad de disponer o no de licencia expresa del Concello.

Fenosa dispone desde mediados de diciembre de la autorización municipal para acometer las obras, tal y como admitió la propia compañía, pero en enero formuló un recurso administrativo contra algunas de las condiciones de ese permiso.

Se trata de enterrar algo más de 1.980 metros de canalización eléctrica desde la subestación de Mourente (en la rotonda de Montecelo) hasta la calle Reino Unido. El plan, presupuestado en 1,5 millones de euros, incluye la eliminación de nueve torretas actuales.