El Concello entregó el pasado viernes las llaves de las casetas a todos aquellos adjudicatarios que habían presentado toda la documentación y por tanto habían firmado el contrato. Pese a las declaraciones y comentarios en redes sociales, el gobierno dice estar satisfecho de haber podido organizar la feria este año y haberlo hecho pese a tener que cambiar totalmente el modelo de gestión, y al entender que garantiza más legalidad y más ingresos para los eventos de Portonovo.

Al respecto, apunta una serie de hechos que el gobierno bipartito ha tenido que superar para lograr la puesta en marcha de esta feria y recuerdan que el pasado 1 de junio cuando el nuevo gobierno se constituyó no había autorización de Costas para la feria de multisectorial. Días después Telmo Martín conoció que la feria, tal y como se venía organizando en años anteriores, no tiene autorización del Servicio Provincial de Costas.

Fue el 12 de junio cuando Costas comunicó al Concello que autorizaba la feria siempre y cuando estuviera organizada por el Concello. Por tanto, este no se podía delegar en un tercero como ocurría en años anteriores.

En los días siguientes el gobierno valoró las nuevas exigencias de Costas y decidió finalmente asumir, mediante la empresa municipal Ínsula Sanxenxo, la plena organización de la feria, y el alcalde encargó un estudio económico de los costes de la feria.

En julio se publicó el pliego de condiciones y a finales de ese mes se procedió al sorteo de las casetas. Una vez realizado el sorteo, se comprobó la documentación, y se abrió un plazo para subsanar la falta de algún documento, ya que muy pocos adjudicatarios habían presentado todo lo necesario (10 de 70, según el Concello).

El pasado día 4 se entregaron las llaves a todos aquellos que completaron el proceso. A los que no se les entregó es porque siguen sin haber presentado toda la documentación.

Señalan desde el gobierno bipartito que las nuevas exigencias de Costas, así como los plazos y los procedimientos de obligado cumplimiento en una administración pública, y que cuando este gobierno se constituye se encuentra con "la imposibilidad de hacer la feria siguiendo el modelo de años anteriores, hacían imposible la celebración de la feria este año".

Por ello, recalca que "si finalmente se ha podido hacer es gracias a un gran esfuerzo de los técnicos del Concello y del gobierno".

Pese a todas las dificultades, la realidad es que la feria estará en funcionamiento durante 58 días, más tiempo que cualquier edición anterior, apuntan desde el ejecutivo de Martín.