La práctica totalidad de la arena de la playa fluvial del Lérez y buena parte de sus servicios complementarios serán objeto de una remodelación y cambio integral después de la temporada estival de este año. Así lo anunció ayer el Concello, que acaba de aprobar un proyecto de 235.000 euros para "modernizar" el área de baño del río. Aunque se insiste en que "está en condiciones adecuadas" para su uso, la necesidad de acometer estas mejoras existe desde hace varios meses, pero la actuación se ha demorado y no llega a tiempo para este verano, por lo que se aplaza para los meses siguientes.

Este proyecto en la playa fluvial del Lérez, en servicio desde hace ocho años, tiene el objetivo de recuperar en su totalidad las condiciones que mostraba en su estreno, en 2009 y mejorar otros apartados, pero se descarta una ampliación de la playa o de las dimensiones, ya que debe limitarse a las tres hectáreas (en tierra y río) de ocupación autorizadas en su día por Costas.

Además de la renovación de la práctica totalidad de la arena, también está prevista la mejora de los accesos y la zona de duchas, entre otras obras. Serán necesarios al menos dos meses de trabajos y tener el arenal totalmente cerrado, según explicó ayer el concejal portavoz municipal, Raimundo González Carballo.

Deficiencias

El edil insiste en que la playa "ofrece a día de hoy todas las garantías", pero admite que en los ocho años transcurridos desde su estreno, ha provocado deficiencias "a causa de la dinámica fluvial, de corrientes y mareas, los agentes climáticos y el propio paso del tiempo".

La actuación parte con un presupuesto de 235.000 euros y se centrará en los 6.676 metros cuadrados de arena, si bien toda la concesión de Costas abarca cuatro veces más.

La principal mejora se centra en la sustitución de la malla geotextil situada bajo la playa, que evita que los lodos del río se mezclen con la arena, si bien su función ya ha perdido eficacia y asoma en varios puntos.

Se colocará una nueva, "más moderna y eficaz", lo que obliga a retirar la totalidad de la arena actual. La intención es aprovechar después la que sea reutilizable, pero se da por hecho que habrá que reemplazar buena parte de este material, que en su día se obtuvo de una cantera de Verducido.

Para ello habrá que instalar barreras anticontaminantes en el río, habilitar accesos para los camiones y adoptar otras medidas que impedirán el uso de la zona, de ahí que se aplace hasta que finalice la actual temporada de baño, que oficialmente abarca desde ayer, 1 de junio, hasta el 30 de septiembre, plazo establecido por la Consellería de Sanidade para sus análisis de la calidad de las aguas.

Desde ayer están en vigor estos controles de Sanidade, en una temporada en la que la playa fluvial del Lérez vuelve a tener la calificación de "insuficiente", que arrastra desde hace varios años. El Concello garantiza, en todo caso, que el agua es "perfectamente apta" para bañarse y así se certifica con la presencia en verano de unos 200 usuarios por las mañanas y 500 por las tarde.

Hasta julio no se establecerá el habitual servicio de socorristas, en la única playa del municipio que dispone de estos vigilantes, y hace unos días se sacó a concurso la gestión del quiosco-bar del lugar. Ya se trabaja en la contratación de esos socorristas, aunque sin una fecha exacta para iniciar su trabajo, aunque se confía en que en julio estén todos los servicios disponibles.