En marzo de 2010 el Concello comenzó el traslado paulatino de todos sus servicios desde la Casa Consistorial a la sede actual de Michelena 30, una mudanza que se dio por concluida en enero de 2011 con la instalación del gobierno local. Seis años han pasado desde que se realizó un traslado a un edificio de la Xunta que se apuntaba como provisional pero que va camino de eternizarse ya que la rehabilitación del edificio de Sesmero en la plaza de España no avanza y no hay otras alternativas para reubicar las oficinas municipales.

En aquella mudanza un servicio quedó en su original ubicación, en los sótanos de la Casa Consistorial: El Archivo Municipal. Y ahí sigue, si bien sus responsables ya han comenzado a programar su montaje en Michelena 30. Estaba previsto desde el principio y para ello se reservó la planta más baja de este inmueble. Pero la humedad, filtraciones e incluso inundaciones de agua que padece de forma constante han frenado esta medida.

Ahora parece que estarían en marcha las obras para evitar un problema grave ya que el agua es el peor enemigo para un archivo. Por el momento ya se fabrican unas estanterías a medida pero el traslado no será efectivo si no se resuelven las inundaciones.

El archivo, con la sede de la plaza de España y un almacén en los bajos del colegio Froebel, ha sufrido un sinfín de emplazamientos, entre ellos los bajos de Pasarón, donde la documentación se acumulaba hace años sin control, lo que supuso la pérdida de parte de ella.

De concretarse el cambio, además de centralizar este servicio con los demás, que precisan de su colaboración en numerosas ocasiones, mejorarían las condiciones de trabajo de una oficina que el pasado año recibió más de dos mil consultas de los ciudadanos el pasado año.