La conselleira de Infraestruturas e Vivenda, Ethel Vázquez, avanzó ayer en el Parlamento de Galicia que la Xunta iniciará en abril la segunda fase de la senda peatonal y ciclista en la carretera PO-308, entre Soutullo y Major, e iniciará este año la contratación de las obras del tercer tramo, que llegará desde A Lanzada hasta Portonovo.

Vázquez destacó que todas las actuaciones previstas en las obras de la primera fase que se están ejecutando entre A Lanzada y Soutullo y finalizarán en verano, fueron acodardas con el Concello de Sanxenxo y tuvieron en cuenta las demandas de diferentes colectivos vecinales.

La conselleira remarcó que este proyecto cuenta con todos los informes favorables de los órganos competentes en materia de patrimonio y medio ambiente y no afectará al Con do Cormorán.

Asimismo, destacó que esta actuación entre A Lanzada y Portonovo, contará con una inversión de unos 6,5 millones de euros por parte de la Xunta y está recogida en el Plan de Sendas de Galicia, puesto en marcha por el Gobierno gallego con el objetivo de fomentar la movilidad sostenible, mejorar la seguridad viaria y favorecer los desplazamientos, a pie o en bici, de vecinos y turistas.

Vázquez manifestó que la construción de esta senda va a significar una considerable mejora para la zona desde el punto de vista de la seguridad viaria y ambiental. Según dijo, el principal objetivo de la Xunta es convertir una carretera para los vehículos también en una infraestructura en la que peatones y ciclistas puedan circular con comodidad y seguridad. Además, se promoverá una movilidad más sustentable, fomentando entre los ciudadanos modos de desplazamiento menos contaminantes y alternativos a la utilización del vehículo particular, con los consiguientes beneficios que esto supondrá para el medio.

La actuación permitirá delimitar mejor las zonas protegidas de lo que es la carretera, evitando la situación caótica que se produce en la temporada de verano, cuando los vehículos invaden todos los espacios posibles que son susceptibles de convertirse en aparcamientos.

La conselleira destacó que este proxecto es compatible con el respecto ambiental y patrimonial y no afectará al Con do Cormorán. Precisó que aunque las rocas no tienen protección, la Xunta respetará la sensibilidad de los vecinos.