"Eucalipto cero: como en Europa" es el título del documento que presentará hoy en un acto abierto al público (12 horas, Casa das Campás) la red "Cousa de Raíces", integrada por cerca de 60 colectivos de toda Galicia. Lo harán con motivo de la celebración del Día Forestal Mundial o Día del Árbol y con el fin de hacer un llamamiento en defensa del bosque autóctono.
-¿Por qué ahora este manifiesto sobre el eucalipto?
-El problema en general del eucalipto, del aprovechamiento que se deriva de esta especie, que básicamente es monocultivo para pasta de papel y tablero de baja calidad, es que tiene unos beneficios económicos, y si no que se lo digan a Ence. En lo que queremos hacer hincapié es en que esos beneficios para la sociedad se convierten en pérdidas, en graves daños tanto a los ecosistemas naturales como para la sociedad. Los perjuicios que para el mundo rural gallego está teniendo el eucalipto debido a la expansión de los cultivos energéticos y de la biomasa va a hacer que muchas comunidades agrarias que están luchando para mantener el mundo rural vivo desaparezcan. Lo que se une al despoblamiento y a la pérdida de explotaciones agrarias. Socialmente, el impacto del eucalipto y lo que nos viene encima va a ser mucho mayor.
-¿Cuáles son las conclusiones sobre esta especie?
-Es un cultivo que está causando al erario público grandes pérdidas económicas. El árbol no es culpable de nada, los culpables son quienes fomentan determinados modelos productivos y que legislan no solo a favor de la pastera, sino que legislan con una mano y con la otra incumplen las propias normas. Estoy hablando de incumplimientos palmarios del Plan Forestal, con el que, desde el año 1992, ya se superó el límite máximo de hectáreas de eucalipto, que eran unas 240.000, porque llevamos ya medio millón. La Lei de Montes estableció una serie de límites al eucalipto para que no sustituya a las carballeiras y a tierras de valor, para que guarden las debidas distancias con los cursos de agua, etc... que se están incumpliendo ante la propia Administración, que no denuncia de oficio. Tenemos que ser los propios colectivos sociales y ecologistas los que iniciemos denuncias por incumplimiento de las condiciones para realizar ese tipo de plantaciones. Esto dibuja un panorama muy preocupante. Por un lado está la penetración muy agresiva del eucalipto en el mundo rural de la mano de los cultivos energéticos, del eucalipto nitens, y de la ocupación impune de las tierras agrarias. Por otro, el abandono del mundo rural, que pasa a ser terreno barato para la especulación con estos modelos, beneficiando a muy pocas manos y dejando limosna a las comunidades que persisten en estos espacios. Falta de oportunidades y abandono debido a este modelo promovido y tolerado por la propia Administración.
-¿Qué se puede hacer?
-Queremos girar esa percepción de que no hay nada que hacer y de que el eucalipto es imparable. Hay alternativas, que pasan, en primer lugar, por el cumplimiento de la ley. En el documento que presentaremos mañana (por hoy) exigimos una serie de mínimos para evitar que perdamos definitivamente nuestros bosques autóctonos y que Galicia sea una enorme plantación de eucaliptos, muchísimos más de los que hay ahora. A partir de ahí, medidas también en positivo. Aquellas personas, colectivos y comunidades de montes que apuesten por modelos alternativos al eucalipto deberían recibir ayudas, apoyo de la Administración, que en estos momentos no hay. Por el mero hecho de poseer una carballeira, ese hábitat es de interés para la sociedad, recibirían ayudas directas sin necesidad de vincularlas a un determinado modelo productivo.
-¿Eso es realista?
-Hay países en los que se subvenciona la permanencia de determinados hábitats porque es la llave para servicios que nos benefician a todos, como la disponibilidad de agua, la biodiversidad, la fertilidad del suelo, la lucha contra el fuego, porque los bosques autóctonos son cortafuegos naturales... Son modelos alternativos olvidados intencionadamente por la Administración en su política sectorial.
-¿Qué superficie de eucaliptos hay plantada actualmente?
-Los datos del último inventario forestal, hablan de que el eucalipto es la especie preponderante en las explotaciones forestales. Los datos referidos a la extensión de eucalipto hablan de medio millón de hectáreas, aproximadamente respecto a todo el territorio gallego un 17%. Es decir, que casi una quinta parte de Galicia está ocupada por eucalipto. Esto es una barbaridad. En Portugal, por ejemplo, la superficie que ocupa el eucalipto no llega al 9%. Tenemos el doble en porcentaje que los portugueses, que acaban de aprobar una moratoria sobre las plantaciones de eucaliptos. ¿Por qué no hacemos nosotros lo mismo? ¿Por qué a nadie se le ocurre parar la situación para reconducirla de alguna manera? Con los cultivos energéticos y la biomasa, en breve tiempo esa eucaliptización se multiplicará y llegará hasta el último rincón del territorio.
-¿Con esas nuevas especies?
-Ahora Ence tiene una herramienta para poder conquistar aquellos territorios que hasta ahora no podía. La herramienta es el eucalipto nitens, una especie resistente al frío. El perfil de la costa gallega, desde Ribadeo hasta A Guarda, intensamente eucaliptizada, llegará al interior gallego, donde aún persisten bosques autóctonos de muy alto valor. Eses eucaliptos llegarán a O Courel, aos Ancares porque esta especie podrá colonizar donde no lo podía hacer el eucalipto glóbulus, el de la costa, porque no crecía por encima de los 600 metros. Esta es la amenaza que queremos trasladar a la sociedad gallega, porque en pocos años podemos perder el corazón de Galicia, de la representación de los mejores hábitats, de bosque bajo y maduro, que hasta ahora estuvieron a salvo de la colonización pastera.
