Un establecimiento comercial ha sido víctima de un nuevo robo en el casco urbano de Pontevedra. En esta ocasión la víctima ha sido una farmacia, concretamente la ubicada en la plaza de Curros Enríquez.

Ocurrió entre las siete y las ocho de la madrugada del sábado, según explicó el propio titular de la botica. Los ladrones no coincidieron por poco con los trabajadores que acudieron a abrir el establecimiento el domingo a las 9.30 horas y que se encontraron con la puerta de entrada de cristal fracturada. Los ladrones aprovecharon esta entrada para personas con movilidad reducida para darle patadas hasta hacerse un hueco por el que entrar a gatas y después desvalijar la tienda. Se llevaron la caja registradora, que apareció más tarde tirada en la calle, y de la que se llevaron dinero en efectivo.

La Policía Nacional ya investiga estos hechos, tras la denuncia presentada por los dueños del establecimiento. Entre otras pistas, analizan las grabaciones de la cámara de seguridad el establecimiento que recogió el momento del asalto.