El pueblo de Marín se sumó ayer al dolor de la familia de Antonio Santiago Fernández, Toneco, en el funeral celebrado en el Templo Nuevo. Vecinos, representantes de todos los partidos políticos de la villa, y gentes del ámbito de la enseñanza, llenaron la iglesia para dar su último adiós al que durante doce años fue su alcalde.
Al funeral acudió la actual alcaldesa, María Ramallo, junto con otros concejales del Partido Popular, como también lo hacían concejales de las restantes fuerzas políticas con representación en la corporación municipal. Allí estaban también dirigentes del Partido Socialista Obrero Español, donde militó Toneco siendo alcalde desde 1999 a 2007, en su etapa socialista. Con anterioridad lo había sido con CDS en coalición con PSOE y BNG entre los años 1992 a 1995.
Dirigentes socialistas como Antón Louro o Modesto Pose, junto con el exalcalde marinense, Fran Veiga, que le sucedió en el cargo, así como otros muchos de la provincia y de los concejales actuales y de los que estuvieron en sus gobiernos, acudieron a mostrar sus condolencias a la familia. Cabe recordar que su hija Luz Santiago es concejala del PSdeG-PSOE en Marín.
También destacó la presencia de numerosas personas relacionadas con el mundo de la educación, ya que Antonio Santiago fue un docente que se ganó el cariño de sus compañeros y de todo aquel a quien dió clases. Durante muchos años fue director del colegio Sequelo, labor que realizó con gran competencia y llevó a este centro a la vanguardia de la educación.
En el recuerdo
Por todo ello, el Templo Nuevo se quedó pequeño para acoger a tanta gente que quiso testimoniar su afecto a este buen hombre que siempre buscó el acuerdo en la política con sus oponentes y no el enfrentamiento, como ayer se destacaba entre los asistentes a este funeral.
Palabras de emoción tuvo la alcaldesa, María Ramallo, quien afirmó que será un alcalde siempre recordado por su pueblo, tanto por su obra como por su carácter afable y que siempre se preocupó por sus vecinos.
