José Luis Muiños fue pionero en la venta de artículos de piel en la feria de Pontevedra, por lo que su puesto es uno de los más frecuentados. Está satisfecho con la ubicación del mercadillo, que considera "buena" y tampoco critica el precio. "Lleva años sin subir. La última vez sería hace casi diez años. Por aquel entonces eran de las tarifas más caras de Galicia, pero ahora no, ahora son asequibles", reconoce.
Sus críticas se centran en la anterior concelleira de Promoción Económica, Carlota Román. "Ella boicoteó la feria. El Ayuntamiento perdió de recaudar mucho dinero por eso", señala.
Se muestra contento porque el Concello vaya a llenar los puestos vacíos, aunque subraya que "ya llevamos un año y pico así".
En su opinión, la única solución a la actual situación de la feria es una apuesta sólida por su promoción. "Lo importante es que se completen todas las vacantes, porque cuantas más haya, menos tirón va a tener el mercadillo entre los ciudadanos, que no vienen", sentencia.
