La celebración del Samaín ha dejado un reguero de desperfectos en el término municipal, siendo Portonovo una de las villas más perjudicadas, donde aparecieron buena parte de las papeleras rotas y otras arrojadas a las rocas.

La quema de contenedores se ha repetido no solo en Portonovo, sino también en diversos puntos de Vilalonga, Sanxenxo e incluso Areas.

Personal de la empresa concesionaria trabajó ayer con la intención de retirar el material dañado, así como en la sustitución de los contenedores destrozados, que han provocado además un daño importante en el asfalto.

Tanto al Concejalía de Seguridad como la Medio Ambiente recuerdan que estas reposiciones tienen un elevado coste económico para las arcas municipales, además de los inconvenientes que suponen para el conjunto de los vecinos, que durante unos días padecerán las consecuencias de la merma de contenedores para el depósito de los residuos.

La edil delegada de Medio Ambiente, Coral González-Haba aprovechó la ocasión para solicitar la colaboración de todos los vecinos a la hora de "preservar en las mejores condiciones los equipamientos públicos ya que ser objeto de vandalismo supone una carga para toda la cidadanía, ya que su reposición la pagamos todos y al final del año la cuantía destinada a este tipo de intervenciones es considerable, sin contar las horas de trabajo empleadas para ello por parte de los operarios municipales".

Fuente de Vilalonga

González-Haba se refirió también a las daños sobre el patrimonio, concretamente en la fuente situada en la plaza pública de Vilalonga, que amaneció con pintadas que entrañan dificultades para su limpieza al estar realizadas sobre piedra.

Cabe recordar que este tipo de hecho también han tenido lugar en otros municipios, como fue el caso de Caldas donde los vándalos prendieron fuego a un tobogán de un parque infantil durante la madrugada de la noche de Samaín.