La Policía Local de Pontevedra detuvo a dos personas por sendos delitos de violencia de género con una diferencia de apenas unas horas. El caso más reciente se produjo ayer por la tarde. Sobre las 16.41 horas se recibió en la central de la Policía una llamada de auxilio de una mujer muy alarmada manifestando que su expareja (que tiene una orden de alejamiento en vigor) se encontraba en el interior del edificio en el que ella vive y que probablemente estuviera en posesión de un arma.
De forma inmediata, se activó el protocolo de emergencia y se desplazaron hasta el lugar dos patrullas de la Policía Local de Pontevedra. Los agentes se encontraron a este hombre en el portal del edificio al que requirieron en varias ocasiones que mostrase lo que tenía en su manos, soltando finalmente un arma de fuego, una pistola, que resultó ser simulada.
Constatado que tenía en vigor una orden de alejamiento dictada por el juzgado, este hombre fue detenido por los agentes municipales que le requisaron también una pequeña navaja entre sus pertenencias. El detenido tiene 38 años de edad.
Por otra parte, la Policía Local detuvo a un joven de 19 años de edad por agredir a una mujer en plena calle en Loureiro Crespo. Fue fundamental la intervención de dos testigos a los que la mujer acudió pidiendo ayuda. Justo en ese momento observaron como un joven se abalanzaba contra ella por detrás, la tiraba al suelo y le daba patadas. Uno de los testigos no dudó en abalanzarse contra el agresor para impedir que continuase golpeando a la mujer hasta la llegada de la Policía Local. Ocurrió ayer a las dos de la madrugada.
