Un mes después del inicio del otoño, las temperaturas veraniegas se niegan a abandonar la comarca y aún hay quien no quiere desaprovechar estos inusuales registros y aún acude a la playa a tomar el sol. Así ocurrió ayer en varios arenales de la ría, como en la de Lourido, en Poio. Y es que Pontevedra se convirtió ayer en la ciudad con las temperaturas más altas de toda Galicia, al rozarse los 30 grados, con una sensación térmica incluso superior.

Meteogalicia confirmó ayer que a las cuatro de la tarde, su estación de Campolongo marcaba 29,1 grados. A esa hora superaba cualquier otro registro en la comunidad, por encima de los 28,3 de Leiro, en Ourense, o los 28 de Boiro, en A Coruña. La estación ourensana subió una hora después a los 29,2 grados, pero la de Campolongo ya alcanzaba entonces los 29,6.

En el resto de la comarca se situaron por encima de los 26 grados localidades como Sanxenxo y Caldas, mientras que en Vigo y su entorno se superaban los 27.

Los datos recogidos ayer en Campolongo son los más altos (en el periodo del 21 al 28 de octubre) que se registran desde 1958, cuando comienzan las series históricas de Meteogalicia, si bien siempre se recogían en la estación de Lourizán, donde ayer las temperaturas eran más bajas que en el casco urbano. Meteogalicia avanza que estas altas temperaturas se mantendrán hasta mañana viernes y el sábado se registrará un ligero descenso, si bien el termómetro continuará el fin de semana con registros por encima de los 23 grados.