La Xunta ha empezado a instalar reductores de velocidad y bandas trasversales de alerta tendentes a garantizar la seguridad de los vehículos en el tramo final de la vía rápida que conduce desde la autovía de O Salnés hasta A Lanzada.

Es una medida aplicada en la desembocadura de esa carretera de alta capacidad, en el citado tómbolo de A Lanzada, tendente a disuadir, concienciar y alertar a los conductores, tratando así de evitar que se repitan accidentes como los ocurridos en los últimos tiempos, cuando turismos e incluso un camión "se pasaron de largo" y tras "comerse" la rotonda situada al final de la vía rápida acabaron medidos en las dunas.

El PSOE había planteado al pleno de Sanxenxo -y lograron su aprobación unánime- una moción en la que argumentaban que en esa salida en la vía rápida en A Lanzada "ya se produjeron varios accidentes, dos de ellos en los últimos días", por lo que reclamaban la colocación de reductores de velocidad y bandas trasversales.