"Este es el mejor cartel que tuvo nunca Surfing, a pesar de que aquí hayan estado bandas internacionales como Arizona Baby, la gente se debe de concienciar de que en nuestra patria tenemos una cantera tan grande que ni nos damos cuenta de ella". Marcos Rivas, organizador de Surfing the Lérez, se refería así al espíritu de la edición 2016: reivindicar las excelentes bandas nacidas en Galicia y cuyo nivel es ya internacional.

El festival que abrirá las fiestas de verano de Pontevedra se amplía "en un cuarto de día", indica Rivas. Será la jornada del viernes 17, en la que actuarán Los Chavales, Samesugas, The Phantom Keys, The Limboos y Tractor Troy, "la mejor banda pontevedresa", indica la organización.

Una edición más (y van 6, 4 de ellas en su actual emplazamiento en la Illa das Esculturas) los niños figuran entre los principales invitados. Así, en la zona infantil habrá clases de DJ con Arturo Delgado y Guly Leiva, que "enseñarán a pinchar en vinilo" y todos los pequeños "podrán coger la aguja para pinchar discos de rock, muchos de ellos no saben lo que es el vinilo y podrán practicar con maestros que tienen más de 500 vinilos", indica Marcos Rivas.

Dany Moure también encabezará esa misma jornada el juego en familia "Á procura do tesouro do cocodrilo".

Ya en el "día grande" del festival, el sábado 18, en los dos escenarios para el público adulto se repartirán los conciertos de Antifrágil, Jhonander, The Phantom Dragsters, Agoraphobia, Igloo, The Blind Crows, Dixie Town, Eladio y los seres queridos, Querido extraño, Atención tsunami, Terbutalina, Novedades Carmiña y Familia Caamagno.

Propondrán "desde pop a rock, garaje, música setentera... Son bandas de Pontevedra, Santiago y Coruña porque es algo que tenemos que defender", indica Marcos Rivas a propósito de la gran potencia musical gallega.

Por su parte, en la zona infantil será el turno de Xarope Tulú Teatro y A Banda dos Cueiros, en una divertida jornada en la que no faltarán los cuentacuentos, talleres de flores y cometas, una zona de librería infantil, juegos populares, dibujos o un taller de graffiti, entre otras propuestas para los más pequeños. Y es que esta zona pensada para menores es "la que más crece" del festival.

De nuevo el botellón estará prohibido, "sería peligroso en medio de niños, padres y abuelos, es un festival familiar", señaló Marcos Rivas.

Por lo demás, habrá más variedad en la zona dedicada a comidas (habrá propuestas para celíacos o personas que opten por la alimentación orgánica) y en una romería del rock como ésta tampoco faltará el pulpo.

En paralelo, talleres, un mercadillo o catas y degustaciones, en un intenso día para disfrutar de la Illa das Esculturas, un emplazamiento que "reúne todas las condiciones para las actividades tan variadas y para todos los públicos y edades", señaló la concejala de Fiestas, Carme da Silva, al presentar el programa del festival.