Los 53 concellos de la provincia de Pontevedra con menos de 20.000 habitantes se beneficiarán de las ayudas básicas de emergencia aprobadas por la Xunta de Goberno de la Diputación.

Se trata de partidas que se entregarán "de manera excepcional y extraordinaria" para que los servicios sociales de los concellos puedan atender las demandas urgentes de los ciudadanos que se encuentran en situación o riesgo de exclusión social.

"Tendrán atención especial aquellas personas que, dentro de esta situación, tengan menores de edad a su cargo", recalca el organismo provincial.

La Diputación destinará a estas ayudas 465.000 euros, de los que 365.000 serán invertidos en ayudas al gasto corriente y los 100.000 restantes a inversiones.

Podrán beneficiarse los mayores de edad empadronados en cualquiera de estos 53 concellos que no dispongan de ingresos suficientes como para hacer frente a los gastos por los que solicitan la ayuda, entre los que se incluyen la alimentación, el uso de vivienda, el pago de recibos, el pago de productos de higiene y limpieza, el pago de productos de farmacia y el pago de desplazamientos o apoyo a la infancia, entre otros.

En la comarca de Pontevedra, podrán acogerse a estas ayudas, los concellos de Poio, Sanxenxo, A Lama, Barro, Caldas, Campo Lameiro, Cotobade, Cuntis, Moraña, Ponte Caldelas y Vilaboa.

La presidenta de la Diputación, Carmela Silva aseguró que los 465.000 euros suponen un aumento de un 27 por ciento en inversión en políticas sociales, "que para nosotros son una prioridad", respecto al anterior gobierno de Rafael Louzán. "Son 100.000 euros más que en 2015", recalcó.

Las ayudas se distribuirán en función de dos criterios: el número de habitantes del concello y su porcentaje de desempleo. Así, recibirán entre 8.500 y 5.000 euros en el caso de gasto corriente y entre 2.400 y 1.500 en el de las inversiones.

Además, Silva insistió en que el servicio de Cohesión Social dispone de un presupuesto de 4,1 millones de euros para 2016, frente a los 3,6 de 2015, lo que supone un aumento del 11 por ciento. "Porque trabajamos por una sociedad más justa", recalcó.