La asociación de vecinos Río Lérez acaba de entregar en el Concello un escrito firmado por su presidenta, Pilar Lavía, y en representación de los residentes en la calle Cruz Roja en la que manifiestan la preocupación de los vecinos ante el "abandono" de la citada travesía y sus alrededores. Aseguran que presenta "un estado lamentable de suciedad, aceras rotas que provocan charcos de agua cuando llueve" así como un alumbrado deficiente y hasta "ratas que salen de las alcantarillas y que se pueden ver por la calle", entre otros.

Los vecinos de Cruz Roja, en una reunión con la directiva de Río Lérez, mostraron "su indignación por el trato discriminatorio que se les está dando con respecto al resto de la ciudad". Lamentan que mientras "se están arreglando todas las calles", sin embargo esta céntrica zona de la ciudad "está siendo abandonada y discriminada" por el gobierno local. Consideran un agravio comparativo con los residentes en otras zonas del casco urbano teniendo en cuenta que "los vecinos de esta calle cumplen religiosamente con sus deberes pagando impuestos" sin ser compensados como en el resto de la ciudad.

Por ello, en dicho escrito reclaman al gobierno local "un trato igualitario y solidario" y para ello solicitan "que se arregle y se humanice la calle Cruz Roja con las mismas características que tiene el tramo entre Padre Amoedo y la plaza de A Castaña" y "no discriminando al resto de los vecinos de la calle como ciudadanos de segunda". También reclaman que la plaza de A Castaña "se humanice y sea un lugar de encuentro para disfrute de los vecinos y no un retrete para perros".