"No puedo decir que generalmente salga decepcionada de la reunión porque siempre se espera quitar siempre algo positivo de ella. En esta cumbre solo se llegó a un acuerdo: todos coincidimos en que hay que solucionar el problema de la ría. Eso es algo positivo, pero queremos realidades". De esta forma se expresaba María del Carmen Vázquez, patrona mayor de la cofradía de Lourizán.
Vázquez definía los retos que deben afrontar las partes implicadas. "Cada uno tiene que hacer su papel. La línea roja es que el día 1 de julio exista un plan de actuaciones firme", al tiempo que advertía que, de constatarse de que los compromisos tomados en el encuentro "fuese una pantomima, seguiremos concentrándonos".
"No me hace gracia ponerme detrás de una pancarta otra vez, pero si no nos dejan más opciones estamos dispuestos a hacerlo porque no podemos dejar morir la ría. Pero espero que no sea necesario. Lo que está claro es que no volveremos a esperar dos años para que hagan actuaciones, esta vez nos pillan en alerta", manifestaba Vázquez. La representante de las mariscadoras de Lourizán también mostraba sus dudas sobre los acuerdos. "Espero que no llegásemos hasta solo para que eviten que nos siguiésemos manifestando".
Para Vázquez en encuentro tuvo dos partes bien diferenciadas. "El principio fue de amargor, fue lo más tenso", señaló. Y es que los mariscadores se llegaron a plantar ante la conselleira de Medio Ambiente cuando esta emplazaba a realizar otra reunión el 1 de julio.
"Otra reunión con los técnicos para saber si había soluciones, como en otras reuniones anteriores. Llegó un momento en el que pensamos que no nos podíamos ir de allí igual que entramos. Fue cuando le replicamos que no podía ser, que en la próxima reunión tenía que hablarse ya de obras concretas por lo menos para minimizar la situación. Cualquier ayuda es importante y estaremos controlando por los propios análisis de Intecmar si las aguas mejoras o no", afirmó Vázquez.
Pero ese no fue el momento más duro del encuentro. La patrona mayor afirmaba ayer que "es decepcionante que aparezcan más problemas". Se refiere al anuncio del alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, del tubo del saneamiento colocado junto a la variante de Marín, que sería de menor diámetro del necesario, produciéndose un tapón en ese punto. "¿Por qué salen cosas nuevas ahora después de tantas reuniones? Sabíamos que Cocheras era el punto cero del problema del saneamiento, pero sorprende que sigan apareciendo problemas nuevos".
