"Choliños, miña Peque, Vidiña: Quixen escribirche moito. Mais xa sabes canto puidera decirche. Perdóame todo, que os peques me lembren sempre, que cumplas todol´os meus encárregos. Eu, almiña, estarei sempre con vós, como che prometín. Faltan uns minutos e teño valor, por vós, pola Terra, por todos. Vou tranquilo. Adeus Vidiña. Vive pra os peques e os vellos; abrázaos, enfíntaos. Sé Ti, miña pequeniña ademirable, a máis valente de todos. Alá sentirei ledicia e satisfacción de Tí e de todos. Lembrareivos sempre, velarei sempre por vós. Adeus. Contigo, cos peques, cos Vellos todos, estará sempre na lembranza, na maís grande, na máis fonda, na máis infinda das apertas, o voso Xandro. P.S: Recei contigo".
Es la conmovedera carta con la que Alexandre Bóveda se despide de su mujer, Amalia Álvarez Gallego, en la madrugada en la que va a ser fusilado, y en la que le encarga que sea "a máis valente".
Apenas llevaban seis años casados: habían coicidido en la Coral Polifónica y se casaron en 1930. Cuando Bóveda es ejecutado en A Caeira el 18 de agosto de 1936 Amelia está embarazada de su quinta hija, que llevará su mismo nombre.
Será la hija póstuma del matrimonio. "Tras el dolor y el terror" que supuso el fusilamiento de su marido y de muchos de sus compañeros, las torturas, encarcelamientos, exilios etc, su mujer "tendrá que sacar adelante la familia, acabar la carrera, trabajar y sufrir los insultos y las humillaciones", recordó el concejal Luis Bará al presentar el parque que llevará el nombre de Amelia Álvarez.
El edil también recordó los "actos de resistencia íntima" protagonizados por Amalia Álvarez, como la fotografía que captó a la madre de Víctor Casas tocando el pino ante el que fusilaron a su hijo o las cáscaras de ese árbol, frente al que también fue asesinado Bóveda, que recogieron sus hijos y que guardó toda su vida.
Con esa resistencia íntima, la viuda también cultivó sus aficiones por la música y la poesía. Éstas no faltarán el próximo miércoles en la inauguración del parque que llevará su nombre, un acto que incluirá intervenciones de los representantes institucionales y de la familia y al que están invitados vecinos y distintas asociaciones de la ciudad.
La zona verde está ubicada en la calle Filgueira Valverde. Se trata de un espacio de alrededor de 3.000 metros cuadrados suma de diferentes parcelas, la principal de 2.000 metros de superficie, en el que recientemente se han realizado obras de mejora.
Es una zona verde "de la máxima dignidad", idónea "para actividades culturales y de ocio", por tanto a la altura de la mujer coraje que el pleno municipal quiere homenajear tras los recientes reconocimientos a Ernestina Otero y Josefina Arruti.
El vicepresidente de la Fundación Alexandre Bóveda y nieto de la homenajeada, Valentín García Bóveda, acompañó a Luis Bará en la presentación del nuevo parque y mostró sus dudas sobre si Amalia Álvarez "perdonó o no" finalmente a los asesinos de su marido; incidió en que "cuando asesinan a Alexandre y a tantos maridos los asesinos se meten pútridamente para siempre en la vida de sus sucesores... Incluso en mi vida, que soy el nieto".
Avanzó que en la inauguración del parque se leerá una poesía de Amalia Álvarez, localizada tras su muerte, que se cree dedicada a Alexandre Bóveda. Asimismo, agradeció al Concello el simbolismo de recuperar la figura de su abuela porque, recordó, no siempre las víctimas pueden perdonar y nunca olvidar: "solo se puede superar desde el resarcimiento".
