De "vergüenza absoluta" calificaba esta mañana el alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores, la decisión del Gobierno en funciones de prorrogar la concesión a la pastera Ence en terrenos de dominio público durante 60 años más. Es una medida, afirmó el alcalde, que supone regalarle a "la empresa privada Ence una cifra de más de 1.000 millones de euros" a cambio de hipotecar el futuro de la ría de Pontevedra.
Reiteró que el Concello capitalino luchar para que esta decisión no sea firme "por la vía política, administrativa, judicial y de movilización social" y expresó su repulsa ante un aparato del estado "más interesado en defender a la empresa privada que al interés general".
Coinciden con la visible tristeza y enfado del alcalde los portavoces del Partido Socialista, Agustín Fernández, y de Marea, Luis Rei. Ambos anunciaron que propondrán al pleno que Mariano Rajoy sea declarado "persona non grata" en Pontevedra.
Luis Rei era uno de los que se preguntaba ayer, "dado el alarde de honorabilidad", quien se llevará "el 3%" de comisión por la "venta" durante este siglo de la ría.
Por su parte, la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, calificó de "incomprensible e intolerable" que un gobierno en funciones tome la decisión de prorrogar la ubicación de Ence "de forma totalmente unilateral" y que compromete el futuro de la ría.
Anunció que el gobierno provincial que integran Partido Socialista y Bloque Nacionalista apoyará las reivindicaciones que lidere el alcalde capitalino.
