La concejala de Urbanismo, Carmen da Silva, no aventuró ayer cuáles son los planes reales de la ONCE una vez presentado este "proyecto de equidistribución", ni ofreció garantías de que la entidad ya dispone de fondos económicos con los que ejecutar a corto plazo esa urbanización, por lo que no se descarga que sea una maniobra de la asociación para evitar que el Concello anule el convenio. En todo caso, esta vía nunca fue contemplada por el BNG (sí por el PSOE) ya que obligaría a devolver la antigua residencia, ahora convertida en centro social tras una importante inversión en su reparación.

La edil señaló ayer que esta tramitación "se llevará paso a paso" y apuntó que el Concello, además de las cesiones obligatorias de viales y espacios libres, se hará con la titularidad del actual colegio Santiago Apóstol, si bien seguirá siendo utilizado por la ONCE mientras no disponga de un CRE alternativo. El Concello también será propietario de un solar edificable de 162 metros cuadrados, pero todo ello no se materializará hasta que se exponga al público este nuevo documento, se elaboren los informes y se apruebe de manera definitiva.