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Una experiencia piloto animó las inspecciones

La primera experiencia piloto en la que se revisó la situación de 30 grandes compañías sujetas al IAE se realizó en 2014 y en ella se detectó que al menos 26 de esas 30 pagaban de menos al Concello. En aquella ocasión el fraude localizado supuso 110.000 euros más al año, con otros 370.000 euros por los atrasos de los cuatro años anteriores.

Según el concejal, de las treinta compañías a nalizadas en su día, tres no presentaban irregularidades, una cuarta no atendió a los requerimientos municipales y las otras 26 pagaban de menos, con cuotas insatisfechas que oscilaban entre los 359 euros y los 76.389 euros. La mayor parte de ellas firmaron entonces el acta de conformidad por la que asumían el error y aceptaban el abono. Sumando los recibos sin pagar de todos y multiplicando la cantidad por los cuatro últimos años (periodo máximo antes de que prescriban estas deudas), la recaudación ronda el citado medio millón de euros. A partir del próximo martes, estas 26 empresas tendrán que pagar 110.000 euros más en cada ejercicio, hasta sumar unos 303.000 euros, ya que hasta ahora abonaban apenas 193.000.

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