La Audiencia Provincial de Pontevedra acaba de dictaminar que sea un tribunal del jurado el encargado de dirimir si Miguel Sanmartín Argibay es culpable o no de la muerte de la marinense Isabel Pérez Fraga en un crimen que se produjo las pasadas navidades en el domicilio de la víctima en la calle Alcalde José del Río. Un juicio en el que, además, los miembros del jurado deberán determinar si el detenido agredió sexualmente a la víctima antes de presuntamente acabar con su vida.
Los magistrados de la Audiencia Provincial dan así la razón a la Fiscalía, que defendía la tramitación de este procedimiento por la vía del tribunal del jurado, mientras que el juzgado de instrucción había optado por transformar las actuaciones en un sumario al entender que el posible delito de agresión sexual no entra dentro de las competencias de la ley del jurado. Además, los dos delitos no se podrían haber juzgado por separado.
La Audiencia Provincial basa su decisión en el hecho de que no ha quedado claro cuál habría sido la presunta intención inicial del agresor, si el posible delito de homicidio o el de la agresión sexual. Es por ello que ha decidido aplicar la jurisprudencia del Tribunal Supremo que establece que en caso de duda tendrá más relevancia el delito más grave, en este caso el de homicidio (que más tarde se verá en cual de sus formas, si un mero homicidio o un asesinato).
Ahora el juzgado deberá señalar fecha y hora para celebrar la vista previa en la que se informará al único imputado por estos hechos de que su caso va a ser juzgado por un jurado, una comparecencia en la que también se ofrece a las partes la posibilidad de solicitar nuevas diligencias de investigación.
En cualquier caso, se trata de una instrucción que está ya bastante avanzada por lo que fuentes conocedoras de la investigación señalan que son pocas las nuevas actuaciones que se pudieran solicitar de tal forma que se calcula que incluso después del verano se podría estar en condiciones de abrir el proceso para formular escrito de acusación.
Según lo trascendido hasta el momento, los informes forenses señalaron que Isabel Pérez Fraga falleció estrangulada, pero también hallaron una lesión compatible con una agresión sexual cometida cuando la mujer estaba todavía con vida y que pudo ser causada con un bote hallado junto al cadáver de la mujer. En el bote se encontraron restos de sangre de la víctima.
El detenido, Miguel Sanmartín, permanece en prisión preventiva en A Lama. Aunque reconoció los hechos ante la Policía Nacional, fuentes del TSXG explicaron que no lo hizo cuando compareció en el juzgado.
