Dos pontevedreses que aceptaron actuar como "muleros" transportando droga por vía aérea entre Sudamérica y España acaban de ser condenados por la Audiencia Provincial de Madrid a una pena de seis años y un día de cárcel para cada uno de ellos como coautores de un delito contra la salud pública.

Según el fallo de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Madrid, ambos acusados (una mujer natural de Caldas de Reis y de 46 años de edad y un vecino de Poio de 53 años) fueron interceptados a la una y media de la tarde del cinco de junio del pasado año en la Terminal 1 de Barajas a la llegada de un vuelo procedente de Brasil en el que viajaban. Cuando se procedió a un palpado superficial de los mismos, se encontró que portaban adosados a sus cuerpos varios paquetes que resultaron contener droga. En concreto, ambos portaban varias fajas en la parte superior de las piernas que contenían una sustancia pastosa que resultó ser cocaína. En el caso del varón, portaba 1,3 kilos de cocaína con una pureza del 34% (en estado puro equivaldría a 450 gramos de droga) y la acusada tres paquetes con 529, 470 y 600 gramos de cocaína, también escasa pureza que supondrían un total de 571 gramos de droga pura.

En el juicio que se celebró el pasado mes de abril en Madrid, y del que ahora trasciende la sentencia, ambos reconocieron los hechos de los que los acusaba el fiscal y que sabían que transportaban la droga y que esta iba a ser destinada al tráfico ilícito a terceras personas.

Desde hace tiempo, se viene advirtiendo un incremento de las personas de nacionalidad española que deciden arriesgarse a actuar de "muleros" transportando droga por vía aérea desde Sudamérica. Estupefacientes que intentan ocultarse tanto en el interior del organismo como adosados al cuerpo de los "muleros" (como en este caso) o en sus equipajes.

Según se recoge en la propia sentencia, en esta ocasión, ambos iban a recibir un importe de 5.000 euros por introducir algo más de dos kilos de droga en territorio nacional, cantidad a repartir entre los dos. La droga incautada, sin embargo, tendría un valor en el mercado negro que reportaría a sus verdaderos propietarios, que no llegaron a ser identificados, unos beneficios de 133.699 euros.

Ambos "muleros" permanecen en prisión preventiva desde el momento en el que fueron detenido, en junio de 2013, un tiempo que ahora se les restará de las condenas de seis años de prisión que les han sido impuestas. Además, el tribunal les sanciona con una multa de 2.500 euros, que se corresponde no con el valor de la droga aprehendida, sino con el importe que iban a recibir estas dos personas por realizar este "transporte".

Pena mínima

En este caso, a ambos se le impone la pena mínima que establece el Código Penal por este tipo de delito al tratarse de una sustancia que causa grave daño a la salud y en de una cantidad de notoria importancia al superar . De hecho, la sentencia destaca el papel que ambos juegan como "meros porteadores" de la sustancia estupefaciente.

Ninguno de ellos, según la sentencia, contaba con antecedentes penales.