El mal es banal y venal, pero por el contrario ni todo es trivial ni todo está en venta. Fue uno de los mensajes de la coordinadora del Aula Castelao, Ana Regueira, al dar la bienvenida a los ponentes y asistentes a la 31 edición de la Semana Galega de Filosofía, centrada este año en analizar alternativas de cambio social bajo el lema "Filosofía e revolución" y en cuyo acto inaugural varios conferenciantes alertaron del escenario de involución en el que nos encontramos: en los derechos laborales, las libertades públicas, el estado de bienestar etc.

Es el caso del pensador italiano Domenico Losurdo, que criticó en FARO la emergencia de los llamados "trabajadores pobres", o del filósofo, ensayista y escritor Santiago Alba Rico, que pronunció la conferencia inaugural y que arremete contra la "Edad Media" mediática de la actualidad.

Tampoco ocultó su preocupación por la involución el decano del Colegio de Abogados de Pontevedra, Ramón Jáudenes. Fue uno de los participantes en la ceremonia de inauguración y criticó que "nuestros gobiernos parecen empeñados en poner límites, algunos de los cuales suponen un retroceso de 30 años".

Denunció que se busca entorpecer libertades como de la de reunión con la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, pensada, recordó, para atajar la crítica, y que evidencia la "desmedida perversidad del hecho legislativo... se busca también entorpecer al máximo la creación de colectivos con voz propia".

De hecho, una de las primeras conferencias de la SGF, la pronunciada por la profesora Alba Nogueira López, se centró en el recorte de derechos fundamentales y libertades, lo que la ponente llama el "amordazamiento de la protesta" en el marco de la crisis económica y social.

Planteó un escenario en el que la UE y EE UU "están firmando un acuerdo que aborda a los irritantes del mercado, en el que se incluyen todas las normas internas que obstaculicen las inversiones internacionales, esto es, la lógica de incesante beneficio empresarial de las corporaciones".

El convenio, explicó, es inaccesible a la población, medios y organizaciones sociales y busca "una homogeneidad social, de estándares económicos, higiénicos y sanitarios, por supuesto a la baja. Vamos, entonces, hacia el cuestionamiento de las normas de seguridad básicas".

Frente a este escenario de retroceso, la coordinadora del Aula Castelao hizo votos en el arranque de la SGF porque "lo que aprendamos y debatamos" en los próximos cinco días de conferencias y debates "sirva para abrir alternativas" a un sistema que precariza las condiciones laborales, recorta derechos humanos y que ha demostrado "no ser una herramienta para transformar la sociedad sino para ganar dinero".

Por su parte, la diputada provincial de Cultura, Ana Isabel Vázquez, se felicitó por una nueva edición de un congreso que se ha convertido en "cita ineludible entre los actos culturales de Galicia, y no es fácil superar las tres décadas hablando de filosofía". Ésta, insistió en que el amor por la sabiduría y el pensamiento crítico "ha de ser potenciado, ahí radica el éxito de esta Semana de Filosofía, en aplicar el pensamiento filosófico a la actualidad".

Recordó que la Semana ha tratado en anteriores ediciones temas como la religión, la Unión Europea, la violencia, la ecología etc., antes de señalar que "ahora es el turno de la revolución, un tema oportuno en un escenario de crisis global" y animó a contribuir al cambio: "la revolución moderna no puede ser violenta sino reflexiva y con altura de miras".

También la vicerrectora del campus de Pontevedra, Antonia Blanco, emplazó a los asistentes a debatir y expresó su deseo de que la SGF "ayude a conseguir en esta primavera la revolución o la reevolución que necesitamos en este país y que la juventud está pidiendo a gritos".

El alcalde, Miguel Fernández Lores, cerró el acto inaugural aludiendo a los numerosos retos que ha de afrontar la sociedad actual para transformarse: redistribución de la riqueza, alimentación digna para todos, sanidad pública, universalizar la educación y relaciones laborales dignas, eliminar el derecho consumista, impulsar la biodiversidad, evitar extremismos religiosos...

Se refirió a continuación a los cambios experimentados en Pontevedra, "una ciudad en manos de los automóviles" que ha dado paso a plazas y calles para las gentes, o con ríos flanqueados por más de 20 kilómetros con sendas accesibles lo que sitúan a la capital "a la cabeza en tendencias en movilidad... Eso para mi también es revolución, actuar localmente pensando globalmente".

Tras la ceremonia de bienvenida, tomó la palabra Santiago Alba Rico para dar lectura a la conferencia inaugural, titulada "Tecnología, opresión y revolución" y en la que expresó su crítica posición frente a las nuevas tecnologías.

¿Las nuevas tecnologías ponen límites o, por el contrario, favorecen los procesos de cambio social o los movimientos populares? Es la pregunta que se hizo para invitar a "no asumir acríticamente el carácter emancipador de esas nuevas tecnologías".

Uno de los grandes mitos asociados a la red es que ha sido decisiva en movimientos sociales de cambio como la primavera árabe. El ponente lo desmintió: "Es todo lo contrario, esos movimientos populares de ocupación física de espacios no son el resultados de las nuevas tecnologías sino una victoria sobre ellas, las nuevas tecnologías quizás sirven cuando la gente ya está en la calle, pero no para sacarlas a la calle... Más bien las redes tienen un efecto adormecedor, aletargador, como la religión, es un poco el opio del pueblo, sin duda hay que aceptarlas, porque en ese sentido no se retrocede nunca, pero sí debemos ser muy críticos y saber qué estamos manejando, sobre todo porque en estos momentos todas esas tecnologías están en manos de una élite muy pequeña que es quien realmente programa y determina su curso, no los usuarios, que estamos infinitamente más vulnerables que frente a un libro, aunque parezca lo contrario".

Por otra parte, esta semana se conmemora el 40 aniversario de la Revolución de los Claveles, el levantamiento militar que el 25 de abril de 1974 puso fin en Portugal a la dictadura salazarista que encabezaba el país desde mediados de los años veinte.

Esta revolución que posibilitó que el país vecino se convirtiese en un estado democrático tendrá un protagonismo muy especial en la Semana Galega de Filosofía 2014, que hoy contará con Otelo Saraiva de Carvalho, principal estratega del levantamiento. Su conferencia, "A Revolución vivida", dará comienzo a las 20 horas.