La hipotética venta de la emblemática sede de Hacienda en la plaza de A Ferrería ya es compleja de por sí, según admite el propio ministerio a la vista de las especiales condiciones del edificio y las dificultades de una recalificación, pero la posibilidad de que ese histórico inmueble se convierte en un nuevo parador, como propuso en su día el PP, o en un hotel de características parecidas parece aún más lejano ante el "parón" que registra este sector en los últimos años en España, donde el número de nuevos hoteles es prácticamente nulo. De hecho, en lugar de abrirse, en la provincia de Pontevedra se estima que en 2012 han cerrado unos 45 establecimientos, con más de mil plazas desaparecidas.

La ocupación hotelera en Pontevedra ha sufrido un drástico recorte desde el inicio de la crisis, un argumento que ha esgrimido el alcalde, Miguel Fernández Lores para cuestiona cualquier posible uso no público de la sede de Hacienda. De hecho, aunque se admite que la oferta de hoteles de alta categoría (de cuatro y, sobre todo cinco estrellas) en la ciudad es escasa, en la actualidad se contabiliza una veintena de establecimientos hoteleros (sin contar pensiones) que suman cerca de 600 habitaciones, lo que supone más de mil plazas. Con la situación actual, las dudas sobre ampliar la oferta son notables y mucho más si el proyecto incluye la compra de un edificio como la sede de A Ferrería, con su cara rehabilitación posterior.

El Gobierno central, propietario del edificio de A Ferrería y de la red de Paradores, acaba de hacer públicos en el Congreso de los Diputados los datos económicos y de negocio de estos establecimientos, y las cifras en Pontevedra no son nada halagüeñas. En las cuatro instalaciones de la provincia (Pontevedra, Baiona, Cambados y Tui), la caída de clientes desde el inicio de la crisis en 2007 hasta ahora se cifra en casi un tercio, con especial incidencia en el parador tudense. Si en 2007 estos cuatro establecimientos alcanzaron una ocupación media del 60,5%, el ejercicio de 2012 se acaba de cerrar con poco más del 42%, es decir, una caída del 30%. La Casa del Barón, en funcionamiento desde 1955, no es ajena a este desplome, si bien su recesión es de menor impacto que en el resto, ya que en estos seis años perdió el 20% de sus clientes y en 2012 registró, por vez primera, una ocupación media por debajo del 50% en todo el ejercicio, que cerró con el 46,99%. En 2011 se llegaba al 53,21% con un descenso notable sobre 2010, cuando se superó el 59%, un porcentaje que se mantenía, con pequeñas oscilaciones en los ejercicios anteriores. El parador gallego como mejor balance es el de los Reyes Católicos, en Santiago, con un descenso desde 2007 por debajo del 17%, si bien Pontevedra es el segundo que mejor soporta esta crisis. De hecho, en Tui ha caído la ocupación en seis años un 40%, casi un 30 en Cambados, más de un 28 en Baiona y un 25% en Ferrol.

Aún así, de los diez paradores gallegos, solo los de Cambados, Monforte de Lemos, Tui y Vilalba presentaron el pasado año una ocupación menor que la de Pontevedra. Por encima de un 47% se situaron los de Baiona, Ferrol, Ribadeo, Santiago y Verín.

Balance económico

Otro apartado incluido en la información desplegada en el Congreso se refiere a los resultados económicos. Según esos datos, en balance final del año 2012 arrojó unas pérdidas de 36.623,70 euros, tras unos ingresos brutos de 1.277.000 euros, unos gastos de explotación de algo más de 1.300.000 euros.

Con estos datos, que se sitúan en parte detrás del Expediente de Regulación de Empleo aplicado en su día por Paradores y que dejó en la calla a dos trabajadores de la Casa del Barón, el gobierno local ya ha advertido que la opción de convertir la sede de Hacienda en un hotel "no tiene sentido". El alcalde echa mano de la situación del Parador pero también del resto de establecimientos de la ciudad, cuya ocupación también se ha visto mermada. En 2012 la ocupación hotelera en la provincia rondó la media del 30%.

Además, se recuerda que el Concello tiene en venta desde hace años un solar en Tafisa, para un hotel de alta categoría, sin que ninguna empresa se haya interesado seriamente por su adquisición. Se trata de una parcela de 3.173 metros cuadrados ubicada en la esquina de José Malvar y la avenida de Buenos Aires y destinada a usos "hoteleros y compatibles". Aunque hubo algunas conversaciones en el pasado ninguna fructificó. Se exigía que no fuera de menos de cuatro estrellas y a ser posible de cinco, ya que en la ciudad no dispone de establecimientos de ese rango y los más cercanos se ubican en Vilagarcía y Vigo. No obstante, lo que no salió adelante al inicio de la crisis, difícilmente lo hará en la actualidad, del mismo modo que la construcción del propio barrio de Tafisa también está paralizado.