perros, playas y pelotas

Parece que ha vuelto la calma tras la reacción de los propietarios de perros que se movilizaron para rechazar la confusa normativa municipal de bajada de canes a las playas durante el año. Al final todo fue una falsa alarma y una falta de comunicación entre la responsable municipal y los afectados. Ahora, la primera asegura entender que durante el invierno no hay por que prohibir que los perros corran por la arena playera, y los dueños de los animales también comprenden que, en los meses de verano deben evitarse molestias e incluso peligros, a los bañistas. Para tanto entendimiento, la verdad, no hacía falta semejante ruido. Y, ahora que llega el verano, cabe reclamar que el concello se comprometa a hacer cumplir la normativa que prohibe a los mozalbetes armar partidos de fútbol en cuanto la marea baja un metro lo que, además de molesto es peligroso, y genera situaciones incluso violentas. No sé por qué será pero año tras año hay que protestar por estos abusos sin que se les ponga solución. Es cuestión de pelotas

maios