La Comunidad de Montes de Vilaboa demanda que se dicte sentencia en primera instancia sobre el pleito contra el Ministerio de Defensa, por la posesión de unos terrenos del monte de Postemirón. Reclama, en concreto, la titularidad de los montes de Pozo Simón y de Fonte Salgueira, que hoy forman parte del recinto del cuartel de la Brilat. El juicio se celebró el 15 de marzo de 2011, por lo que ayer se cumplió un año a la espera de que se dicte resolución judicial.

En el mismo juzgado de A Parda se resolvió también el año pasado, pero en este caso en solo tres meses, un procedimiento similar de la Comunidad de Montes de Salcedo contra el Ministerio de Defensa. Aquel juicio se celebró el 31 de junio de 2011 y el fallo se conoció el 27 de septiembre.

La Comunidad de Montes demanda este fallo para poder continuar con la tramitación de recursos en otras instancias, hasta que se dicte sentencia definitiva por parte del TSXG. "La verdad es que no esperaba que los plazos fueran tan prolongados y se dilatara tanto el procedimiento", declaró el presidente de la Comunidad de Montes de Vilaboa, Xabier Míguez.

Este colectivo basó su defensa sobre la propiedad del monte de Postemirón en el "aprovechamiento inmemorial" del terreno por parte de los vecinos, fundamento en el que también basaron su demanda los comuneros de Salcedo. Para demostrarlo, los vecinos de Vilaboa testimoniaron los aprovechamientos comunales que realizaron en ese monte, al igual que lo realizaban en el resto de la parroquia.

Por otra parte, el perito de la comunidad, autor del informe pericial sobre la posesión del monte, testimonió sobre la documentación que demostraría la antigüedad y la continuidad de los aprovechamientos de pastoreo, leña y tojo por parte de la comunidad de vecinos de la parroquia de Vilaboa.

El conflicto por el monte de Postemirón comenzó con la pretensión del Ministerio de Defensa de legalizar los aprovechamientos de agua de Fonte Salgueira y Pozo Simón situados en ese monte. Posteriormente, sobre el perímetro de ese terreno el Ministerio de Defensa estableció un perímetro de seguridad, a lo que los vecinos de Vilaboa, como los de Salcedo, se opusieron.

A pesar de la modificación de la franja de seguridad, excluyendo las viviendas, la Comunidad de Montes continuó con el pleito por la propiedad de los terrenos, avalado por la unanimidad de los comuneros.