Aparcar en medio de un carril, obstaculizar el tráfico en giros e intersecciones o bloquear accesos a propiedades privadas dejará de ser una práctica impune en los viales rurales del municipio. La existencia de numerosas quejas y denuncias por parte de usuarios de carreteras secundarias y de residentes en zonas próximas a éstas han obligado al gobierno municipal a tomar cartas en el asunto. Así, se anuncia la inmediata puesta en marcha de una campaña de la Policía Local para vigilar y sancionar este tipo de incumplimientos de la normativa de tráfico.

El propósito es erradicar hábitos todavía existentes en caminos y zonas viarias con una intensidad de tráfico media o baja. Lugares en los que la vigilancia es habitualmente menor que en las zonas más pobladas del municipio. Algo que precisamente ha dado pie a que en determinados puntos se hayan convertido en problemáticos en lo que a circulación se refiere. De hecho, durante los últimos meses han aumentado en las dependencias del Concello la demanda de un endurecimiento del control policial.

En algunos de los casos los vecinos critican que no solo son turismos o furgonetas el tipo de automóvil mal estacionado, sino que también proliferan incluso vehículos de gran tonelaje como camiones o autobuses. Desde el Ayuntamiento se advierte de que la Policía Local intensificará de inmediato su presencia en esta clase de emplazamientos, y que no dudará en sancionar aquellos aparcamientos no reglamentarios, así como otras prácticas que supongan infringir el código de circulación. Por lo tanto, además de exponerse a una multa económica los infractores también podría ver reducido el número de puntos del carné.

Desde el gobierno local insisten en que la puesta en marcha de esta campaña se produce una vez constatado el aumento de las protestas vecinales. "Hay problemas que pueden llegar a suponer un peligro; aunque hasta ahora no se han producido accidentes, lo cierto es que hay un riesgo porque hay usuarios que aparcan en medio de un carril y obligan a los demás a invadir el contrario en zonas de poca visibilidad", se explica desde el consistorio. Además, también se detalla que este tipo de circunstancias han dado pie a "pequeños conflictos vecinales".

La vigilancia se realizará indistintamente por la mayor parte de viales secundarios. Las labores de vigilancia, en cambio, apenas se desarrollarán en la PO-308, donde la competencia es de la Guardia Civil de Tráfico.