Ocho de cada diez nuevos contratos de trabajo firmados en la ciudad de Pontevedra pertenecen al sector servicios, un ámbito al que se van incorporando en número creciente iniciativas de servicios empresariales. Fueron un total de 1.884 las relaciones laborales que se formalizaron en el último mes del año en el municipio capitalino, de las que 1.616 se adscriben al sector terciario, de acuerdo con los datos recogidos por el Servicio Galego de Colocación-Inem. Significa, por tanto, que los servicios acaparan el 85,8% de los nuevos contratos y menos de 268 casos corresponden a otros sectores.

Es esta dependencia del sector servicios lo que, unido a la crisis laboral existente, explica el elevado nivel de temporalidad del empleo pontevedrés y la escasa apuesta por el trabajo de calidad del empresariado local que sólo en cuatro ocasiones de cada cien opta por fijar, de entrada, una relación laboral estable (indefinida).

Al 4,35% de los contratos indefinidos que se hicieron de entrada en Pontevedra –82 en números absolutos–, hay que sumar otro 5,3% de contrataciones que fidelizaron el empleo de personas con experiencia. En total fueron 101 los trabajadores pontevedreses que vieron como sus contratos temporales se convertían en estables.

Temporalidad

Aempe contextualiza también la temporalidad del empleo con el hecho de que el grueso de las empresas locales son pymes y por tanto su capacidad de inversión y expansión, sobre todo en un contexto de crisis, es muy limitada.

En todas las modalidades de contratación: indefinidos de entrada, temporales y de conversión en indefinidos, las trabajadores duplicaron el número de trabajadores lo que demuestra, según coinciden en señalar sindicatos y organizaciones empresariales, la mayor flexibilidad laboral de las mujeres y su creciente formación. Y en el caso de Pontevedra, apuntan unos y otros, el hecho de que sea el sector servicios el más activo es un plus añadido para esta diferenciación por género, ya que el comercio y la hostelería, son sectores tradicionalmente femeninos.

Las estadísticas oficiales permiten constatar que, a pesar de los nuevos 1.884 contratos, diciembre no fue un buen mes para el empleo local ya que mantuvo la tendencia a la baja (en este caso ligera) de los últimos meses. La visión es más optimista si se cotejan los datos actuales con los de hace un año: se hicieron 499 contratos más.

Datos de la EPA

En todo caso, los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) acentúan el desolador panorama laboral en el municipio, al situar la tasa de paro en el 22,6%, la más alta de las siete grandes ciudades gallegas. Si se tiene en cuenta que la misma EPA cifra en 42.000 personas la población activa del municipio (mayores de 16 años que trabajan o están en disposición de hacerlo), en la ciudad habría 9.500 vecinos desempleados, tres mil más que hace un año.

El 22,6% de tasa de paro en la ciudad es muy superior a la registrada en ciudades más castigadas por el desempleo en el pasado, como Ferrol o Vigo, donde no se supera el 19%.