El tamaño del grano, el molinillo, el prensado o la temperatura son cuatro elementos fundamentales a la hora de conseguir hacer un buen café, pero que sin embargo frecuentemente quedan en el olvido.

"Un café tarda 25 segundos en hacerse y hay que estar pendiente. Si no, nunca saldrá un buen café", afirmó Manuel Fontán, gerente de Alfa Meta, el centro formativo organizador de la demostración sobre cómo hacer un buen café que se celebró ayer en El Cafetín de Pontevedra.

Durante la muestra, una veintena de profesionales hosteleros de la ciudad pudieron observar cómo de una cafetera que funciona utilizando el método normal se puede hacer un café diferente. Además de la materia prima, la técnica de "fabricación" es fundamental.

Como ilustración, los asistentes contaron con la presencia de Manuel Garrido, el experto barista, un joven de 20 años que tuvo que formarse hace dos años en Portugal. "En España no hay ninguna cultura del café", afirmó Garrido, "piensan que todo está en darle al botón".

Esta es una creencia contra la que el joven experto y el centro Alfa Meta pretenden luchar por medio de los cursos de quince días que el centro organiza para formar baristas entre los trabajadores de la hostelería. "Nuestro objetivo es enseñar a sacar el buen café, difundir cuál es el bueno y sacar el malo del mercado", sostuvo el Garrido. "Es el producto final de una comida y la impresión que le queda al cliente del local".

El barista y el gerente de Alfa Meta coinciden: hay una gran escasez de personas capaces de hacer un buen café. Según los expertos, para ser un buen barista es fundamental mimar el café, conocer el producto. "Lo que pretendemos es que sea un producto que tenga su protagonismo, no que sólo sea un complemento", afirmó Fontán.